CAPITULO
LXIV.
quitatis nostrae : ecce -respice,
Populus tuus omnes nos.
IO
Civitas Sancti tui facta
est deserta , Sion deserta facta
est , Jerusalem desolata est.
I 1
Doi:nus sanctificationis
no–
strae et gloriae nostrae , ubi
laudaverunt te patres nostri , fa–
cta est in exustionem ignis , et
omn
ia desiderabilia nostra
ver–
sa sunt in ruinas.
I2
?,
Numquid super his con–
tinebis te , Domine , tacebis , et
affliges nos vehementer? ·
• De tu Santuario, de Jerusalem.
2
' Ha sido incendiada por los Cal–
deos ,
y
despues por los Romanos.
3
L as mas preciosas , ricas y hertno–
s:as que ha bi
a
en Jerusalem: Palacios, ga–
leria ,
T
mp
lo . .. todo ha sido arruinado.
4
~
Podras, Senor ,
detener tu miseri-
tra maldad: he aqui'. mfranos,Pue–
blo tuyo somos todos nosotros.
·
IO
La Ciudad de tu Santo
a::
h1zose dl!sierta, Si6n ha q uedado
yerma, Jerusalem es ta desolada.
\I
La casa de rauestra santifi–
cacion
y
de nuestra gloria , en
donde te alabaron nuestros padres,
se ha c
ertido en llamas de fue–
go
2
,
y
toO.asnues tras~cosas
pre–
ciosas
3
han parado en ruinas.
12
i,Pues, Senor,
al
ver estas
cosas te estaras q uedo
4,
callaras,
y
nos afligiras
hast~
el extremo
?
cordia?
~
t.e daras por desentendido?
t h<>
te movera.
a
piedad un espetl:iculo tan
.£uriesto? {_no nos diris siquiera ·uda p ala–
'bra de consuelo?
~permitiras
qne seamos
arruinados hasta un total exterminio?
La
respuesta del Sefior
a~stas
ansias del
Pro..
pheta esti en
el
Capitulo siguiente.
·c
AP ITU LO L
XV.
Isaias prophetiza la vocacion de los Gentiles
,
y
la reprohacion de loJ'
Judios por sus abominables pecados. Venga.J!za del Senor
co~~ra
este
P tt.?blo
:
mas los escogidos de entre ellos sera11
salvos. Bendu:tones de
·
Dios
sobre
su
Iglesia
por
Jesu
Christo.
1
Ouaesierunt •me qui
an–
te
non interrogabant , invene–
runt
qui non quaesierunt me:
dixi:
Ecce ego, ecce ego ad gen–
tem
q
uae non invocabat nomen
me
um.
~
Los
Gentiles qoe antes no me co-;
noc' an , Juego que oyeron hablar de
m1
a mis Apostoles, me buscaro.n con g ran–
de ansia
y
muestras de segrnrme ;
y
por
~sto
des;che a un Pueblo ingrato ,
y
sali
a
Raman.
x.
20.
1
Demandaronme los
que
antes no preguntaban por
mf
i:,
hallaron~e~os
que no me bqsca–
ron: dixe: Heme aqu1, heme aqu.£
a
una Nacion
que
no
invocaba..
m
nombre.
a abrazar con el
m~yor
afeCt:o
~ -~te nu~vo que a ntes
DO
mvocaba
ffil
<ll!iombre.
S.
PABLO
Rom. x.
20.
aplica este texto a
l a conversion de los Gentiles. Y la repro–
bacion de los
J
udios nace de ellos mismos.