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S A N MATH E O.

7 Orantes autem nolite mul-

7

Y

quando orareis no ha-

tum loqui , sicut E thnici. Putant

bicis mucho ' , como los Genti-

en im quod in multiloquio exau-

les ; pues piensan que por mucho

d iant ur.

hablar serán oídos.·

~~. 8_

Nolite ergo

assimilari

8

Pues no querais semejar a

eis.~'t:i~Y.I!Ster

quid

ellos : porque vuestro P adre sabe

gpus sit vobis ,

iiñt'eqil-~~

ta-

l o que

~ab.eis

menester ántes que

tj,s eum.

se lo p1da1s.

\, 9

Sic ergo vos orabitis

a :

0

9 Vosotros pues así habeis

I>ater noster , qui es in Caelis:

de orar • : Padre nuestro

3

,

que

sanétificetur nomen tuum.

.,

es( é en los C ielos

4

:

santificado

JO

Adveniat regnum tuum.

Fíat voluntas tua , sicut in C ae-

lo et in terra.

·

1 I

Panem nostrum supersub–

stantialem da nobis hodie.

• el

verbo

?C'potrt~XO~-COIJ

,

que significa

orar

con instancia,

expresando el sumo respe–

to , recogimiento

y

fervor con que nos

hemos de poner en la presencia de Dios

para dirigirle

nue

stros ruegos

y

oraciones.

1

T. Gr.

,u.it

13n1oAo,.~crl!-n

,

no hablei.r

imfti! o superf

lu

amente.

Este era un error

de los Gentiles , creer que así como los

':Jueces se dexan persuadir a fuerza de dis–

cursos adornados

y

elegantes , podrian

ellos del mismo modo ganar a Dios a

fuerza de palabras.

,.

Esca

oracion ,

_e

SAN

AousTTN

Srrm.

CLXXXI V.

de T emp.

es tan perfeéta

y

tan fecunda , que comprehende en po–

cas palabras todo lo que se puede pedir a

lX..>s para adquirir los bienes , para evitar

los males , y para conseguir el perdon

de

los pecados.

3

¡Que consuelo tao grande p

ara Jos

verdaderos hijos de Dios el poderle

Jlam.ar

P~dre

a

boca llena ! Se dice

nuestr

o y

no

m1o ,

porque la oracion de los Christianos

es

en

general por \!>todo el cuerpo de

Ja

Iglesia.

4

Porque aunque

e<:.~,

Dios en todas

partes , es el Cielo

.

onde

ha

fixado

el throno de su

s

La

erE;

ce

SAN

sea el tu nombre '·

1 0

V enga el tu Rey no ' : há–

gas«:--,tu voluntad , como en el

C ielo así tambien en la tierra

7 •

1 1

D anos hoy nuestro pan

sobresllbstancial •.

H om. xrx.

consiste en ser irreprehensible

en todas sus acciones ; por manera que

los que fas vean, den a

Dios

la gloria ·

que le es debida.

6

Pedimos a Dios , que rcy ne gene–

ralmente en todo el mundo ; y por consi–

guiente , que sea exterminado el R eyno

del D emonio.

SAN GEitÓNYMo.

D cbC–

mos cambien , segun

el

pensamiento

de

SAN

"':y PRJANO

d e ornt. D rnnini,

pedir

sin e

~r:

a Dios en c.nUestras oraciones,

que no

'amos excluidos del R eyno

Ce–

lestial e

~

to lo fueron los Judíos.

7

C

f<no

la voluntad de D ios se cum–

ple perG

.amente

en el

Ciclo , donde los

Angeles

~· Bienaventurados

con la mayor

sumision } fervor: están siempre rendidos

t..~mte

el

throno del Señor de la Magestad–

de la mismaLmanera pedimos a Dios ,

qu~

110s conceda

la

gracia de hacer su volun–

tad , no en parte , sino de cumplirla ente–

ramente

y

de todo corazon.

CnRYSOST.

in Mntth . .1-Iom. .

YIX.

s

Todos los Padres

han

entendido por

este

P an

el alimento que cada dia necesi–

tamos para sustentar nuestro cuerpo ,

y

el

divino de la Eucaristía , sin el qual no

puede vivir nuestro espíritu.

En

este

lu–

gar

y

en S"'N

LucAs

xr. 2.

en que se

anuncia esta oracion , se lec constante-