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SAN MA,'fHEO.
exterminant enim facies suas, ut
porque demudan 'sus caras, pa-
appareant hominibus ieiunantes.
ra hacer ver a los hombres que
Amen dico vobis , quía recepe-
ayunan. En verdad os digo, que
runt mercedem suam.
recibieron su galardün.
Tu autem cum ieiunas, un•
17
Mas tú quando ayunas,
ge e
fl¡ciem tuam
unge tu cabeza y lava
tu
ca-
lava:
_
ra ' :
18 N e videaris hominiou ·""'-
18 Para no parecer a los hom-
l~nans ,
sed Patri tuo, qui est
·\)res que ayunas , sino solamente
in abscondito : et Pater tuus,
'a tu Padre , que está en lo escon-
qui videt in abscondito , redqet
di
·~:
y tu Padre, que ve en Jo
tibi.
ocu ro ' , te galardonará.
19 Nolite thesaurizare vobis
19 No querais allegar para
thesauros
in
terra : ubi aerugo et
VOS(.:\tros
thesoros en la tierra,
tinea demolitur: et
ubi
fu res
donde orín
y
polilla los consu-
fodiunt, et furantur.
me :
~en
donde ladrones lo&
20
Thesa urizate
a
autem vo- -
bis thesauros in Caelo: ubi neque
. aerugo , neque tinca demolitur;
et ubi fu res non effodiubt , nec
furantur.
21
Ubi enim est
thesaurus
tuus ,
ibi
est et cor tuum.
22
Lucerna
b
corporis tui est
oculus tuus.
Si
oculus tuus fuerit
~
I
A la Hmosna
y
!t-'h oracion de que
el
Señor ha hablado :'inres , juma ahora
el
ayuno, que segun el Evangelio MARC.
1x. 18. es una
de
las armas mas poderosas
q~
tenemos para vencer al demonio. Y
prosigue condenando la hy pocresía de los
Phariséos , que con sus exterioridades so–
lamente buscaban las alabanzas de
los
l10mbres.
~
2
No se ha de entender esto a
hierra
como lo observa S
JuAN
CnRYs6sToMo
iu Mntth. H om. x:< r.
El sentido verda–
dero de estas palabras
es
,
que así como
Jos antiguos se perfu
'?n y lavaban la
cara en los dia.s d
rb. y de festejo,
de
la
misma ma
de
emo~taccr
bri-
llar en nucs
ostro una s
.'t
alegria
el dia
u
ayunamos , para ;psconder
G
Luc.
XII.
33·
J.
Timol
lYl·
19.
desentierran
y
roban.
20
Mas allegad para vosotros
thesoros en el Cielo, en donde no
los consume orin
ni
polilla :
y
en
donde ladrones no los desentier–
ran ni roban.
21
Porque en donde está tu
thesoro ,
aUl
está tambien
tu
co–
·razon
4 •
22
La antorcha de tu cuerpo
es
~\ojo
: Si tu oj<;> fuere scnci-
1
e!;·.'
nuestro t'1esoro ,
y
estorbar que la vnni·–
dad nos :urrebatc
el
mérito de nuestro
l
ayuno.
3
T.
·~r.
0,
,-é:í
q>cut~:Z,
t'll
lo p1lblico:
añade el r ..'<to Griego.
' ..
Un ce_razon apegado a las cosas
y
riquezas de acá abaxo , dice SAN
j UAN
C HR
vsósTOMO , es incapaz de cmender
las verdades que tocan al Rctyno de lps
Cielos : está sordo a las voces del Señor,
que declara que son Bienaventurados los
pobres de corazon
y
de espíritu. Lo que
.
se
dice de las riquezas
,
se
debe entender
de rodas las otras cosas , cuyo amor se–
ñorea el corazon de los hombres ; porque
todas elbs esd.n comprehendidas baxo de
este
nombr de
t/taQro
,
en donde csrá
nuestro corJ.zon.
b Luc. x r.
34·
/