CAPITULO VI.
2
Cum ergo facis eleemosy-
z
Y así quando haces limos-
nam , noli tuba canere ante te,
na, no toques la trompeta delan-
sicut hypocritae íaciunt in Sy-
te de
tí,
como los hypócritas ha-
nagogis et in vicis, ut honori-
cen en las Synagogas y en las
ficentu r ab hominibus. Amen di-
calles , para ser honrados d
co vobis , receperunt mercedem
hombres '.
_R.., "'
os diw,
suam.
rec1 ""'
su galardon ' .
3
Te autem faciente eleemo-
~3
Mas tú quando haces
~~synam, nesciat sinistra tua quiclTmosna , no sepa tu siniestra
~
faciat dextc.-a tua:
que hace tu diestra:
4 Ut sit eleemosyna t
in
~4
Por manera que tu limos-
abscondlto, et P ater tuus, qui
na sea en oculto, y tu Padre, que
vldet in abscondito, reddet tibi.
ve en lo oculto, te premiará
1 •
5 Et cum oratis , non yitis
5 Yquando orais, no sereis co-
sicut hypocritae , qui ama nt in
lfro los hypócritas, que procuran
Synagogis et in angulis platea-
orar en pie en las Synagogas y en
rum stantes orare, ut videantur
las esquinas de las plazas , pa ra ser
ab hominibus: amen dico vobls,
vistos de los hombres •. E n verdad
receperunt mercedem suam.
os digo, recibieron su galardon.
6
Tu autem cum oravel'is,
6 Mas tú quando orares, en-·
intra in cubiculum tuum, et clau-
tra en tu aposento, y cerrada la
so ostlo, ora P atrem tuum in
puerta, ruega a tu Pad re en se-
abscondito; et P ater tuus, qui
creto
'; y
tu Padre, que ve en lo
videt in abscondito, reddet tibi.
oculto , te reaompensará.
cho a sus Apóstoles:
Vuntra luz b¡j le de
tal mnnern dcdmzte de los hombn
,
que
vean 'VUI!Siras
bueu-.,s obras
,y
&
ifiqu,:n
p or ellas n
'VIll'Siro
P adre , q
está en
los Cirios.
M ATTH.
v .
t6.
En
ste lugar
condena solamente
el
fin perve
, que se
proponen los hypócriras
y
h · 1bres va–
nos , quando exponiendo sus
bras a la
vista de los hombres
,
solo buscan en est.
sus
:~.labanzas
,
y
no la gloriat.e D ios co–
mo debieran.
1
Los Phariséos hacian tocar una trom..
pera para juntar los pobres,
y
ganarse
la
re~
puracion de hombres caritativos. .El Señor
condenando esta hy pocrcsía nos mand:t
hacer limosna ¡ pero de tal m:mera, que si
e~
posible no lo sepan las mismas manos,
de que nos servimos para hacerla. SAN
JuAN
CHRvsÓsT.
in Matth.
Hom.
XIX.
2
T.
Gr.
.Xwíxvtr,
1
recibei
;
y
Jo
mis–
mo en los
Yf.
5. 16.
J
T. Gr.¿,
Té;
cp«~·~~ ,
en
lo
príblico;
y
lo mismo en los
.,.~-y.
6. 18.
4
Confirma el Señor la doé.l:rina pre .....
cedente , condenando las práéHcas de los
Phariséos
1
y
enseñándonos la manera
de
tener oracion.
t;íl
s
T .
Gr.
T~ CA .,.~ lt~tJ71'1~ ,
que
utá
e11
lo esco11dido:
Quiere el Señor , que para
orar nos rcuremos
a
nuestros aposentos,
y
cerremos
la
puerta para evitar ser
vi~s
de
los hombres ; lo qual pudiera enr6nces
sernos motivo de tentacion : o como
Io
explican SAN HILARlo
y
SAN AcusTJN,
q~cre
que entremos dentro de nosotros
mismos ,
y
que cerNmos bitm la puerta
p ara orar al P adre Celest·i,:rl en lo secrrto.
Esco
es , que nuestra
o~acion
debe hacerse
en la presencia de Dios ,
y
en el olvido
de rodas las co
exteriores , cerrando la
trada a otros pcnsa–
os hagan
COUOCC.I.'
nuestras mi–
~ienes
que
&c. Y así en el texto
...... ".icgo
orar
que usa
1~ Vul~ata,
se lee