20
JUEGOS FLORALEH
·=-
uiuguna de sns bellas
y
sen ti llle11tnles t•aucioue'3
qukhna!':.
Ad.:unás, esa leyeuJa es, eomo dice
~u
autur,
un
úwcente anac·ronismo,
por qne en ella se vé
fign ·
1
ar á HuaHpan·\tuachi, en fod.,s lvs combtltes
y
:u:cioues de guena quE\ tuvieron lngar en
1817
con
}as tropas del general Don Gregorio
.A
r·aoz de
La
1\ladriJ,
~:;iendo
a:-Í que Juan había dejado de existir
en
ti
ataque de las
Carretus
el:¿ de Ag<?tsto de
1816,
nu
U1t!S
aut e.-3 qtw el Uoruuel Padilla.
Pero siquiera esa galana
y
patriotiea plmua,
en ese hermoso eus;ayo novelesco, lH\ desentrañado
del polvo del pasado la venerable memoria de
1111
próce1' de la iudepend-eucia, mientras que otros lite·
tatos, uo menos aventajados, poníau sn ·iln:-;t.ració:J
y
su taleuto al servieio do las otlio:-as
ludws
de
campanario
y
de las rue1.quiudades persoualistas
1
bnsran<lo fo.r·tuua
y
gloria
á
la sombra de ras eulo–
datlas
bmH1em:-;
de la denwgogía.-- . -- ... - ... : •.
En uua de las casas solariegas del Cu?.co lJa ..
Litaba HÚu, al finalizar el siglo X
Vlll,
la última
familia real de la diunstía iucásica; á la sombra de
los agrietados muros de ese vetusto. edificio, se veia
reu~cer
tiernos retoños de aqnel tr·onco corpulen–
to, carcomido por los siglos
y
dertibatlo por la fé–
rrea
y
brntal
mar.JOdel
de~polismo;.
de ese trouc@
falto de savia, do esos tallos nacidos al acaso eu
lóbrego rincón, siu el esencial
y
fecuudante
copcut·~
so de la lnz intelecttJal, del.aire de la liLet•taa•.
y
del
calor que prest.a la pasión
y
el sentimiento, nació una.
flor lozana
y
pnra,cual eu el prado nacen las flores eu .
una mañana de primavera,
y.
al esparcir su aroma
~·
al lucir sus galas, contemplando todavía la bella au–
rora de su vida, fné arrancada por brutal ma–
uo, de aqnel clásico riucón
y
trasplantada al helado.
Potosí.