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Los

MEDICOS PERlJANOS

Y lAS ESTERlLl'ZAClONES FOR'ZADAS

iPOR

QUE TENDRfA QUE HABER SUCEDIDO

DE OTRO MODO?

Para mediados de 1994 me encontraba en los ultimos afios como

estudiante de medicina. Salvo dos meses durante mi intemado, hice

casi toda mi carrera en hospitales de Lima. Ese afio, durante mi rotaci6n

en el scrvicio de ginecologfa como alumno de septimo afio, me

toc6

atender a una joven mujer que se habfa realizado una maniobra abortiva

clandestina y habfa llegado al hospital con un cuadro infeccioso

generalizado. Pese a los intentos de un manejo conservador, la infeccion

generalizada progreso y se planteo llevarla a sala de operaciones para

extraerle el utero y ovarios como ultimo recurso para intentar evitar

que fallezca. Su estado era pesimo y mientras todo el equipo trabajaba

al lado de ella para intentar estabilizarla antes de llevarla al quirofano,

el medico ginec6logo asistente a cargo hizo un comentario cargado de

ironfa

« •••

al Papa y a los curas habrfa que traerlos aquf para que nos

ayuden...

».

Algunos meses despues, ese mismo 1994, en mi rotaci6n a

pediatrfa, asistia a una cesarea de emergencia. Mi labor era ayudar al

residente de pediatria en la atenci6n del recien nacido. Luego de extraer

al hebe y realizar las maniobras para parar el sangrado, el residente de

ginecologfa le pregunt6 al medico asistente de ginecologfa si

«

ligaha»

a la paciente. El medico asistente pregunto entonces

« ••.

[cuantos hijos

tiene?...

».

Luego de responderle que la paciente ya tenfa cuatro hijos, el

medico asistente asinti6 y el residente procedio a terminar la operaci6n

con esterilizaci6n quirurgica incluida. Tiempo mas tarde me informe

queen 1994 la esterilizacion quirurgica ni siquiera era un procedimiento

que se ofreciese en los programas de planificacion familiar del Estado.

En ambas ocasiones ni yo, ni las instrumentistas, ni las

enfermeras, ni el anestesi6logo, ni los medicos residentes hicimos

objeci6n alguna. Tampoco recuerdo denuncias ni quejas luego de la

operaci6n de cesarea, ni algun cat6lico (muy probablemente la mayorfa

de miembros del equipo) indignado por el ironico comentario sobre

las autoridades de la Iglesia. Loque sf puedo recordar es que

el

medico

asistente fue

el

mismo en ambas oportunidades.

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