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GP: ¿Añoranzas de la Universidad?

JB: Creo que de ella proviene la mayor parte, en todo caso la mejor y la peor parte

de mi primera formación. No obstante las reservas que haya que hacer, porque

sólo suministró en desigual intensidad, y a veces con notorias deficiencias,

conocimientos y perspectivas y estinmló contradictorios intereses, entusiasmos

o preocupaciones, la Casona del Parque Universitario dejó rmahuella imborrable

"

en mi vida y en mi espíritu....

Al recordar, muchas veces fuera del Perú, a la Universidad de San Marcos, me he

preguntado con frecuencia ¿Qué fue lo que dio para

mi

formación intelectual y

qué no me llegó a suministrar? Hablo, por cierto, desde el ángulo muy hmitado

de rmo entre los muchos estudiantes en el período de 1919 a 1927 y como rmo

entre los muchos catedráticos entre 1929y 1930y 1935 a 1956. Distinto puede ser,

lógicamente, el prmto de vista ajeno en otros períodos o dentro de la misma

'

"

epoca.

GP: Evoquemos a la Biblioteca Nacional ..

JB:

J\1i

primer recuerdo de la Biblioteca Nacional se remonta a los años 1914 ó

1915, sin duda, más probablemente en este último. Quise ir a leer allí, pero

fui

rechazado por no tener la edad

mínima

necesaria para gozar de ese privilegio... En

conmemoración del episodio, dispuse que la primera Sala de la nueva Biblioteca

n

Nacional abierta al público en 1947 fuera la del Departamento de Niños. La

estampa de la Biblioteca Nacional, tan familiar para los estudiosos hasta mayo de

1943, es ahora rm recuerdo que va esfumándose y embelleciéndose con el tiempo

hasta que nadie viva para evocarlo. La puerta de entrada abríase por la calle de

Estudios

y,

al atravesarla, se ingresaba en rm claustro con sobrios portales en los

cuatro lados yrm amplio espacio descubierto en el centro. Era la clásica vista de rm

convento antiguo lleno de rma nobleza que los pretenciosos edificios modernos

n

no suelen tener.

Basadre 1981: 265-266

Basadre 1981: 266

Basadre 1981: 422

Basadre 1981: 419

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