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SERMONES
se
ignoran.
?
por ventura
tambien
1quando se saben,
y
no se .practícan,
-se han de reputar
p~r ausentes~
No
son palabras , sino obras buenas las
justificaciones de Dios;
y
así pue-·
.den no desearse p9r la flaqueza del
alma '·
y
en la mente donde
~e
c:ono..
ce su grande utilidad, puede apete-
cerse su deseo. Pues muchas veces co....
nacemos lo que se ha de hacer ,
y
no lo
hacem.os,porqu.e no nos gus...
ta el obrar , aunque deseamos que
nos guste. Corre
~delante
el enten–
din~iento,
y
~ igue .
perezosamente,
y
algui~as
veces no
s~gue
débil el hu–
mano afecto. Por esto apetecía de–
sear los que conocia por
bi~nes,
ape–
teciendo la delectacion de aquellas
-
~
'