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l)E ÓPT'IC/1.
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Si queremos ver .obgetos cuya distancia .no
lle-
Fig.
gue á las
I
5
ó
I
6
pulgadas , supongo, dice Jurin, que el
ánulo máyor muscular de la uvea se coi1trahe y aumenta
con esto _ la convexidad de la -cornea.. -P-or consiguiente los
ra'yos se refringen mas,
y ·
esto compensa su mayor diver–
gencia al entrar en el ojo. Así que
dejam.os. de mirar dichos
obgetos, el espresado ánulo deja de obrar,
y
la cornea cobra,
por su elasticidad, la convexidad que suele tene.r quando
miramos á la distancia de
I ; ·
ó
I
6
pulgadas.
3
4 o
Qyando queremos mirar obgetos que estan
á
una distancia mayor :...que la de
I
5·
ó
I
6
pulgadas , supon...
.go que los proce~us ciliares se contrahen , y esto no
lo
pueden- egecutar ~in atráher
á
sí,
y
un .poco ácia adelan–
te , los bordes de la superficie anterior de la capsula que
los contiene. Al mismo tiemi:o el líquido encerrado entre
la
capsula
y-
-et.
cristalino pasa indispensablemente del me--i
dio
á
l~s orillas de qicha superficie anterior , que se ha–
llan algo levantadas po,r la contraccion de los procesus
cí'...
liares ; por lo qual dicha superficie se pone menos conve-.
xa. Así, considerando el cristalino, su capsula,
y
el .agua que
hay entre_los dos , como que tienen todos una misma fuer•
za refring~nte (
y
mientras la ·esperieocia no ensene lo con-...
trario , es muy lícito este supuesto ) ,
y
componen un cuer:..
po único de figura lenticula.r _, es ·constante que siendo su
superficie anterio,r menos convexa , los rayos se han de re–
fringtr
menos ,
y
juntarse mas ·tarde. En el instante
que
los procesos ciliares dejan de contrahers·e , la. superficie an-
Torn.VI.
O 3
te-