Angeles,
y
·Denionios.
223
jados de la· Palestina , fueron transferidos los.
diez Tribus
á
Nínive ,
y
despues
los res–
tantes
i
Babilonia ,, sujetados
á
los Asirios,
y
consiguientemente
á
los
Medos,
.y
Persas , se
encuentran nombres particulares de ciertos,
y
determinados espíritus. Se lee en el libro de
Tobías el de Rafael (
1 ) •.
En Daniel se encuen–
tra
el de
fy.liguel ,
y
eL-
de
Gabriel,
cuyos dos
últimos son tarnbierÍ conocidos en el Nuevo
Testamento
1
(z
J ..
8
En el libro
quarto
de
Esdras se
hace
tambien. mencíon de otro, Angel ,
_á
quien lla–
·ma
U
riel ,
esto
es, fuego,,
ó
luz.
de
D_ios
(3 ).
Y
sin embargo·
que:
este-
libro no
tiene auto–
ridad
canónica
en
la Iglesia , parece que San
Ambrosio
re~onoce
á
Uriel por uno de
los
sublimes
espíritus: (
4 ).- El P.
Mabillon
refiere
se invocaba
en las, Letanías
con
San Miguel,
San Gabriel
~
y
San Rafael en tiempo de Carlo
Magno en algunas
Iglesias de
Francia ; mas
ya
( I)
Tobice cap.
3·
v.
2r~
. (2)
Danielis cap.
8.
v.
16.
cap.9.
v.
22.
cap.
10.
vers.
21.
Lucce
cap.
I.
Judce
cap.
9.
Apocalyp. cap.
I'J••
. (3) Ego jejunavi diebus septem ululans,
&
plorans sicut mihi
mandavit U riel Angelus.
Esdrce lib.
4.
cap. 5. v.
20.
(4) Non moritur Gabriel ,non moritur Raphael, non mori–
t ur
U
riel.
Ambr. lib.
3.
de Fide, ~ap.
3.