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y
con él,principio del Espiritu
San~
to
que nos guia á todo bien.
DIA C
XI
1 l.
Todo lo deben,
y
pueden pedir en,
nombre
de
Jesu-Christo.
J
oann.
XV.
l
5•
'TO
os he escogido con el fin
de
• 1
.l.\
que produzcais fruto
,
y
que
.
-vuestro fruto permanezca
,
y
que mi
.padre os conceda todo lo que pidie–
reis en mi nombre.
Con que la cau–
sa de este gran fruto ,
y
de su inter–
minable duracion , es que concede–
rá
el Padre quanto
se
le pida
er1
nombre del Hijo. En otro tiemp<J
decia Dios:
ro
lo haré por mi
amor~
y
para glorificar mi nombre;
pero
-aquí ya nada concede sin.o en nom..
bre del Hijo ,
y
no hay que decir
que muda de lenguaje, pues lo que
Dios hace por amor del Hijo, lo ha–
ce por amor de sí propio , porque
el Padre,
y.
el .Hijo no son mas-que
"·"--\ .,:,
uno