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conocemos;
quar>do
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áinatrio,' ,,
quando la abrazamos. No permita
Dios,que creamos tener brazos para
detenerla, y estrecharla. Se goza de
'
~
e11a-t
como se goza de la luz quando
fa
vemos, y se apodera de todos
ios
que
la
vén como es en sí; porque nos
descubre todo lo que es hermoso ;
y
ella misma es mas hermosa, que to–
dos
los obgetos que nos manifiesta.
i
Pero se puede comprehender;
que medie alguna cosa entre nues–
tros ojos ,
y
la luz , para descubrir-
1
la
~
Nada absolutamente. No hay
mas
que abrir los ojos ,
y
la luz se:
introduce por sí misma. No hay
otro camino para ir
á
ella : la ver-–
dad es mas que la misma luz : nada
puede guiarnos adonde está la ver..·
dad , sino ella misma. Preciso es,
que ella venga , que
se
acerque, que
se abata ,
y
se atempere..
¿
Y qué
otra cosa es Jesu-Christo , sino la
verdad , que se acelera
á
venir
á
nosotros,y que se oculta bajo
de
una
forma acomodada
á
nuestra
flaque;
za,