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DIA LI.
La
Eucharistía es
el
Viatico
de.lo~
moribundos.
C
Onsiderémos ahora el cuerpo
del Salvador , como que es el
agradable Viatico de los moribun–
dos. Yo me muero, mis sentidos se
apagan , la vida desfallece :
i
qué.
puedo apetecer en semejante estado,
sino lo que me pueda quitar el te~
mor de la muerte ,
y
sacarme de la
esclavitud, en que me ha tenido es–
te temor horrible todo el tiempo de
mi vida? Salvador mio, que me trai-4
gan vuestro adorable Cuerpo ; aquel
Cuerpo inmortal , aquel Cuerpo es–
piritualizado para recibirJo dentro
del mio;
y
de ese modo no moriré, si–
no masbienviviré:quien come mi car~
ne,
decís,
tiene la vida eterna,y
ro
Joh vr.
55 •
le
resucitaré en el ultimo dia.
Y que-
dará en este cuerpo muerto una se-
milla de la vida,que la corrupcion no
podrá alterar.
-
To-