·l'salm.
I
5
º
*·
10.
~16
cido en
las personas
que havian
muerto con
muerte
natural :
era
necesario
que la venciese ,
aunque
huviera sido violenta.
Aquellos
á
quienes
havia
resucitado,
queda-.
ban despues mortales ,
y
~ujetos
de nuevo
a
la muerte. Era nece–
sario' que la muerte venciese
a
Ja
misma
muerte.
En su
prol-?ia
Per–
sona
havia
de hacer ver una viéto–
ria tan cumplida. Despues que los
Judios mataron
á
Jesu-Christo,
ha
via
de
resucitar
este
por
su
pro-–
pía virtud 'para no bolver
a
mo–
r.ir,sin ha
ver
visto
jamas la cor–
rupcion, como havia
prophetizado
el Psahnista:
Vos no permitireis-,
que
vuestro
Santo
vea la
corrupcion.
Lo que
se ha hecho
en la
Ca-.
beza , se. cumplira en
los
miem•
bros.
Jesu-Christo
nos
ha
asegu·
rado
la
im1nortalidad
mas
segu–
ramente ,
y
con un titulo mas
cierto ,
y
mas
constante ,
que el
que teniamos , fundado en
la pro-–
mesa hecha a Adan. Esta immor.-
ta--