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grais,
porque pedis mal, para
te1Jer
Jacob.1v.3
0
ton que satisfacer
d
vuestros malos de--
Jeos.
Pedir
mal , es pedir sin
fé ,
co-
mo
dice el
mis.moAposto!.
Si
ne-
Id.
>·
6
&eJitais de sabiduritJ pedidla,
PfrO-
con
fé,
y
sin titubear
:
teniendo
por–
cierto, · que
la
consiguireis, si
la
pedis bien , si
la
pedís con
fé ,
si
la
pedis
con perseverancia.
El
Salvador no
condesciende
con
nuestros ruegos ,
quando
pedi-;
n1os cosas contrarias
a
nuestra
sal–
vacion.
Pidamos
nuestra
conver- .
sion ,
y
la conseguiremos.
Alma
religiosa ,
el
fruto
de la
doé1rina de
Jesu-Christo
acerca de
la
oracion ,
ha
de ser, que
tu
le
seas
fiel
en
aquellas
horas que
con
_agres
a
esta oracion. Aun
quando\
estuvieres
distr~-dda
interiormente,
si
gimes , si
sientes el estarlo ,
si
deseas no
estarlo ,
y
si para no es- ,
tarlo permaneces fiel , humilde ,
y
r cogida en lo exterior : si esto ha–
~
, la
obediencia
que da
a
Dios, _
N
'