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En aquel entonces la campaña peleaba al parecer inútilmente, y sin em–
bargo, la victoria coronó sus heróicos esfuerzos.
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Hoy es acto de voluntad de sus habitantes ahogar á los oscuros rebeldes
con solo presentarse firmes al lado de la autoridad.
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Si os es simpática la voz de vuestro general y amigo, no la desoigais
cuando se h ace oír para recordar el deber.
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Montevideo, Dbre.
I I
de
I
870.
Francisco Caraballo.
b
Dia 15-Un
diario situacionista dá cuenta en los siguientes
términos de la reunion habida entre los principales miembros del
Gobierno para tratar sobre las proposiciones hechas por el Gene–
ral Aparicio el dia 13, cuyas resoluciones, sin embargo, nunca se
cumplieron: r ehusándose el General Batlle y su Ministerio pos–
teriormente, á contestar siquiera la nota del jefe revolucionario
y menos aun á nombrar comisionados que tratasen de la paz:
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A la r y 3/ 4 de hoy se dió lugar á la lectura de la nota pasada por el
jefe sitiador al Gobierno de la R epública.
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Todo cuanto ella encierra, tiende á que el Superior Gobierno nombre
una Comision por su parte, la cual con otra que nombrará el Comité de los
sitiadores, hará cuanto patrióticamente se pueda alcanzar, para sin menoscabo
de la dignidad nacional y de los sitiadores, llegar á un arreglo de paz.
• El coateµido de la nota ea cuestion, fué combatido por el Dr. D. Fer–
min F erreyra y Artigas, argumentando ese señor que toda otra cosa que no
fuese el completo sometimiento de los sitiadores, era desdorosa á la Nacion.
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El Sr. Bustamaate (D. Cándido) aprobó en parte la opinion del señor
Ferreyra, sin por eso estar conforme en todo el argumento de su opinion.
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Despues de hablar otros señores en el mismo sentido, el Dr. D. Pedro
B~stamante
hizo presente al Superior Gobierno lo inconveniente que en su
opinion era el dejar sin coatestacion la nota aludida, debiéndose tener pre–
sente, agregó, que la mayor parte de las cuestiones hasta h oy habidas en
nuestro país, todas habían concluido por medio de convenciones, tendentes al
mismo fin que el que impulsa al jefe de las huestes revolucionarias.
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Dijo tambien, que el rechazo á toda contestacion categórica y que no
correspondiese á la dignidad del diplomático mensajero de la nota, seilor
Mac-Dounald, Ministro de S. M. B. redundaria en perjuicio de la actualidad.
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En el mismo caso,
s~gun
el mismo seilor, se colocaría el Gobierno para
con las demás naciones, por cuanto Aparicio, antes de presentar la precitada
nota, la había puesto en conocimiento de los demás diplomáticos estrangeros.
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El parecer del Sr. Presidente, fué favorable á la indicacion del Sr. Bus-
tamaate, deliberando que en acuerdo de Ministros se resolviese la cuestion con
el
éxito mas honroso que pudiera dársele.
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La mayoria de la reunion, compuesta de todos los jefes de la guarnicion,
de los miembros de la Comision Permanente y Tribunal Superior de Justicia,