Los labradores
S. LUCAS 20
malvados
Maestro, reprende á tus discí-
sí, diciendo: Si dijéremos, Del
pulas.
cielo, dirá: ¿Por qué, pues, no le
40 Y él respondiendo, les dijo:
creísteis?
Os digo que si éstos callaren, las
6 Y si dijéremos, De los hombres,
piedras clamarán.
todo el pueblo nos apedreará:
41 Y como llegó cerca, viendo la
a cp.7.29.
0
porque están ciertos que Juan era
ciudad, lloró sobre ella,
profeta.
42 Diciendo: ¡Oh si también
tú
7 Y respondieron que no sabían
conocieses,
á
lo menos en este tu
de dónde.
día, lo que toca
á
tu paz! mas ahora
8 Entonces Jesús les dijo: Ni yo
está encubierto de tus ojos.
os digo con qué potestad hago
43 Porque vendrán días sobre ti,
estas cosas.
que tus enemigos
~>te
cercarán con
bh :29.3,4
9 Y
comenzó
á
decir al pueblo
baluarte, y te pondrán cerco, y de
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3
·
esta parábola: eun hombre plantó
todas partes te pondrán en estre-
~~-
4
6
2
una viña, y arrendóla á labradores,
cho,
i-~2.
1
•
y se ausentó por mucho tiempo.
44 Y te derribarán á tierra, y á
10 Y al tiempo, envió un siervo á
tus hijos dentro de ti; ay no de-
d
M
t.
2:4·
z.
los labradores, para que le diesen
jarán sobre
ti
piedra sobre piedra;
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del fruto de la viña; mas los la–
por cuanto no conociste el tiempo
braderes le hirieron,
y
enviaron
de tu e-visitación.
e
1 P. 2. 12.
VaCÍO.
45 Y
1
entrando en el templo,
!Mt.
21.12.
11 Y volvió
á
enviar otro siervo;
comenzó á echar fuera
á
todos los
~~;.'f¡.
15
mas ellos á éste también, herido y
que vendían y compraban en él,
11,
18.
•
afrentado, le enviaron vacío.
46 Diciéndoles: Escrito está:
0
Mi
ia~;7.
12 Y volvió
á
enviar al tercer
casa, casa de oración es; mas
o
~s.
w.
7 ·
siervo; mas ellos también á éste
vosotros hla habéis hecho cueva de
h
Jor.
7.
u. echaron herido.
ladrones.
13 Entonces el señor de la viña
47 Y enseñaba cada día en el
templo; mas los príncipes de los
sacerdotes, y los escribas, y los
principales del pueblo procuraban
matarle.
48 Y no hallaban qué hacerle,
porque todo el pueblo estaba sus–
penso, oyéndole.
CAPÍTULO 20
dijo: ¿Qué haré? Enviaré
mi
hijo
amado: quizás cuando
á
éste vie–
ren, tendrán respeto.
14 Mas los labradores, viéndole,
pensaron entre sí, diciendo: Este
es el heredero; venid, matémosle
para que la heredad sea nuestra.
15 Y echáronle fuera de la viña,
y le mataron. ¿Qué, pues, les hará
el señor de la viña?
16 Vendrá, y destruirá
á
estos
Y
ACONTECIÓ íun día que, en-
¡
Mt.
21.
labradores, y dará su viña
á
otros.
señando él al pueblo en el
~~;~;·~.
Y como ellos lo oyeron, dijeron:
templo, y anunciando el evangelio,
27- 33.
¡Dios nos libre!
llegáronse los príncipes de los
17 Mas él mirándolos, dice: ¿Qué
sacerdotes y los escribas, con los
pues es lo que está escrito:
ancianos;
¡ SaL 118.
iLa piedra que condenaron
2 Y le hablaron, diciendo: Dinos:
22
•
los edificadores,
¿con qué potestad haces estas co-
Ésta fué por cabeza de es-
sas? ¿ó quién es el que te ha dado
quina?
esta potestad?
18 Cualquiera que cayere sobre
3 Respondiendo entonces Jesús,
aquella piedra, será quebrantado;
les dijo: Os preguntaré yo tam-
mas sobre el que la piedra cayere,
bién una palabra; respondedme:
le desmenuzará.
4 El bautismo de Juan, ¿era del
kep.l9.-t7.
19 Y kprocuraban los príncipes
cielo, 6 de los hombres?
de los sacerdotes y los escribas
S Mas ellos pensaban dentro de
echarle mapo en aquella hora,
33