- 3 -
P ara los e fec tos d e ese confinamiento, Francisco Pizarra
comtslo–
nó a A lonso de A lvarado a reanudar sus exploraciones, en Chachapo–
yas d e la región d el Chinchaysuyo, a la que pertenecía Huánuco Viejo;
a Alonso Mercadillo, a explorar el río Huallaga, llam ad o entonces con
ese nombr e, desde la ·confluencia del río Huayapamba del actual de–
vartamento de San Martín, hasta el río Marañén; a .Gómez ele Alva–
rado, a la zona d e Huánuco V iejo; a Pedro de Candia, a l Mad<re de
Dios, aseguránd ole la existencia de un rico imperio, y a Pedro Ver–
gara, a Bracarnoros
de
Jaén.
Garcilaz.t\ ,.Jjce que Hernando Pizarra para ..librarse de ia sos–
pecha
y
terno· de enemigos, envió a muchos capitanes a nuevas con–
quistas".
Man~.Hesta,
también, que
"Hernando
Pizarra estuvo preso en
la Mota ele Medina d el Campo ( España) hasta mil quinientos sesen–
tidos por la acusación que le hizo Gómez de Alvarado, ante la Coro–
na, por la
mU!J;rte
de Diego de A lmagro
y
otros abusos"' ..
El verdn
~1!ro
propósito de seguridad política, . de las
comtstones
conferidas por
F
rencisco Pizarra a los alrnagristaS Alvarado, Merca–
dillo, Candia y Vergara, tuvo que restar en éstos el contingente
de
voluntad que, en otras circunstancias, habrían aportado al debido
cum–
plimiento de
la
comisión. Mercadillo recorrió hasta
el
río Amazona"i y
contramarchó a fines del año mil quinientos treintinuevc;
Vergara
y
Candia malgastaron su fortuna, habida, en cuanto a este último, de la
distribución dt:l rescate de Atahualpa. Fuero n únicamente los Alva- ·
rado qujenes
~eran
forma
a !a
comisión. Alonso de Alvarad?
fundó
Chachapoyas, ...
n rrJl
qu inientos treintinueve con el
nombre de San
Juan de la
Fmni;m,,
y Gómez de A lvarado oficializó la de Huánueo
\ fiej o, con cu;o objeto eligió los alcaldes mayores que lo fueron Ro–
dríguez Martínez
y
Diego Carbajal, ambos alm.agristas.
y
dió
a ese
lugar el título de ciudad.
Gómez de Alvarado no fundó población, algo que puaiera
l'ta–
marse zona residerl.cial urbanizada, y fué ésta
1a
razón
prin'?ipal que
tuvieron
en
cuenta, Francisco Pizarra
y
lCs encomenderos de
la
CIU–
dad de los reyes, para descalificar aquel título, y reducir su catego na
a la condirión de villa. A d emás, Gómez d e Alvaraclo durante el corto
tiempo que
permaneció en
Huánuco Viej o estuvo
ccnstantemente ase–
diado por los caudillos Jllatupac e lh uaparru que habían militado a ór–
denes de Calcuchimac.
Lo que
existía en
Huánuco V if'jo
y lo que
alfí
quedó y se conser–
va hasta
la fecha, en estado ruinoso, ha sido preincaico y del incanato.
Así lo atestiguan los restos del Palacio, Castillo o Fortaleza; la primi–
t iva p ob lación c!e viviendas circulares del cerro Golga y la situada