Sin Otro motivo, me es grato retribuirle sus
bue•
bos augurios de felicitaciones .
•
Lo saluda atentamente S . S . S.
OTRA DECLARACION
Señorita:
•
¡Qué satisfacción tan inmensa experimenté anE>–
che en la reunión que dieTOn
s~s
señores papás y a la
que tuve el honor de ser iu.vitado!
¿Qué sentí en mi alma al escuchar su voz ca–
denciosa y al ver fija en mí su enloquecedora mi–
rada? No
ilo
sé ; aún no he encontrad'o palabras con qué
poder explicármelo . Sólo puedo decir que sentí inun–
dado mí corazón por una dicha desconocida, embriaga–
dora; que me- hacía ver la vida a través de unos bel!ísi–
mos prismas
y
cuya existencia jamás soñé.
Yo que he visto transcurrir muchos de mis ju–
veniles años en locos devaneos ; yo que, hastiado ya de
necios placeres, encontraba la:· existencia monótona y
pesada ; yo que me burlé siempre del amor noble y pu–
ro, considerándolo como una puerilidad, una ridiculez,
hoy siento cambiada mi vida por la pasión y creo la exis–
tmcia del más preciado don que puede conceder
el
Su–
premo Hacedor, y
el
amor el más noble y gran9e de los
sentimie·ntos humanos.
¡Qué momentos tan embriagadores fueron para
mí aquéllos en que, cautivada mi alma por
los{
mágicos
efluvios que emanan de su ser, fijó¡ en mí sus
ojo~
y
nuestras miradas se encontraron acariciadoras!
J
Me es.
tremed de placer
y'
me sentí transportado al Paraíso1 ·