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to, donde entregadq. a
1_og
placeres pas6 el resto de
st
vida. Antes de morir divjd19
~1
Imperio en dqs parte,s; de
jó el reino de Ouito a su hijo Atahuallpa
qué
lo tuvo d1
ia
Princesa
Pa.~ha
y
el Cuzco a Huascar, su tégítimo he
re'dero. Si bien esta división debía dar lugar a la más san
grienta guerra civil del Imperio
y
facilitar la conquisti
española, nadie se atPevió a coñtrade.cir la voluntad de
monarca a quien por sus altas prendas
y
su incomparabij
gloria veneraron todos como a un Dios.
..
.
HUA'SCAR Y ATAHUA'LLPA.- Conforme ;
la ..expresa disposición de H uayna- _
Ka~ajh,
recibl!
H
uásc~r·la
borla encarnada, al mismo tiempo que. su her
mano paterno,
Atahuallp~,
era reconocido soberano d
Quito.
·
Segúl). la, opinifm común .ambo"s monarcas
rema
ron pacíí'icamente durante cinco añds, poco 'más o me
no~,
has'ta que los cortesanos del Cuzco reflexionaron :
Huáscar d-iciéndole que no podía ab}urar su s'agrada mi
sión de inca
y
·que era su deber conservar la integrida<
del Imperio con ;todos los países conquistados por su
antepasados. Htiáscar, escuchando estos co:nsejo's, diri
gió a· su hermano una especie de ultimatum por medio d•
un mensajero manifestándole que no podía aumentar
Ul
palmo de tierra a su re_ino; que debía. rendir vasallaje :
su a,utoridad
y
r~conocer
la misión sagrada que tenía co
mo
a
únic.o hijo del sol.
Atahuallpa, que era de temperamento
belicoso
atreyido y astuto, recibió con fingida sumisión el encar
- go, esperando una circunstancia propicia para .realiza
los ocultos designios que tenía con respecto a su her
mano.
No tardaron mucho en conrenzar las
hostilida
des; _pues, con motivo de haber muerto el jefe de los ca