También es intersante el retablo del altar
mayor, costeado por el Obispo Mollinedo, a cu–
ya munificencia
y
gusto
artfs~ico
se debió ta rn –
bién el obsequio del púlpito.
La
par~oquia
de San Blas ofrece,
asimis–
mo, el inter és
de
sus callejuelas de un subicJ.o
sabor arcaico
y
colonial.
SANTA
CATALINA
El convento de Santa Catalina se asienta
sobre las ruinas de
Acllahuasl.
Se fundó a prin·
cipios del siglo
XVII (1604),
con religiosas
que se
trasladaron
de Arequipa, a
conse–
Cle
os
f
ecue t
§
terremotos
que
a
iudl
wión
a
quitect ó
v-.i.--jJ:X_,,;;;.'1:)-'e
e
ro
es
il
o.
¡:>
o
&.
ece
intecé
us lienzos,
qu
se
estacan los firmados por
el
pintor cuzqueño
J~an
Espinosa de los Monte ..
ros. Tien"e
t~mbién
retablos interesantes, entre
los
que sobresalen los balconcillos que
se
cuel–
gan
en
los muros de la izquierda y las
'Yerj
e–
rías del coro, donde
se ostenta el escudo del
Obispo Mollinedo, benefactor de esta Orden.
A los interiores del convento, tampoco
se
puede penetrq.r,
por
la
prohibición
canónica
que hay
al
respecto.