51 / 108
-
41 -
mos, aprovecharon algunas veces los "Leit..
motive" arquitectónicos de an1bos estilos ante–
riores, o sea el signo escalonado co1no adorno
sobre puertas, nichos y ventanas del priiner
período, como también
el
motivo de las puer–
tas
y
ventanas angostas arrriba y anchas
abajo, del segundo período arquitectónico o
sea del estilo cuzqueño. Esto se
ve
palpable–
mente en
el
palacio de Pilcokaina
en
la
Isla
del
Sol. Fig ..... .
Con lo anteriorn1ente dicho., no quere·
mos decir que en
el
primero y segundo
pe~
ríodo todas las construcciones fueran de pie–
dra labrada y artísticamente ejecutadas,
sóe
lo
los templos, viviendas dA superiores y
la
1nayoría de las obras
de
defensa eran tales;
el pueblo bajo, vi vía cual hoy vive, en chozas
de las más pritnitivas
y
algunas veces dentro
del suelo., en agujeros poteados cual troglo–
ditas.
Quiénes eran los autores de los dus pri.·
meros períodos, se ha de saber con exactitud
una .vez q·ue se llegue a estudiar el a1nplio
n1aterial craneano, que i:;e halla en los "estra–
tos de
cultura", de los constructores
de
aquellos n1onumentos.
En lo que toca al último período,
ya
no
es ningún enigma, por ser el que los castella–
nos hallaron, o sea el de la dorninación deca–
dente de los últimos restos dinásticos de los
Huillcas o Incas que los encontraron en uti-
6