Table of Contents Table of Contents
Previous Page  85 / 174 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 85 / 174 Next Page
Page Background

- 67 -

Aquellos naturales que viven corno in–

crustados en las brefías, prendidos de los

peñascos para no rodar a los abismos,

son en el primer momento, parcos en su

decir, como si temieran exhalar en cada

sílaba un átomo de vida; pero cuando se

ha logrado

inspirar1~s

abiertamente la

confianza, y ser su amigo, se descubre en

ellos una segunda personalidad, inteligen–

te, casi siempre comunicativa, un corazón

abierto y sobre todo, un archivo de pa–

sajes históricos, de anécdotas y de poé–

ticas supersticiones de las que también

he podido recoger algunas.

De esos documentos vivientes, de los

que aún quedan algunos, como he dicho,

por los rincones de la patria, pueden to–

marse muchos datos que tal vez nos sir–

van para llenar los claros de nuestra his–

toria nacional. De allf, de esos hombres

que por ley natural el tiempo va arran–

cando a la vida, he conocido este relato :

La tiranía de Rosas, extendida por to–

do nuestro país, dió fin con el valiente