-
25o
-
Esto es lo que se ha ofrecido, estudioso lector, poner
en
arte para saber la lengua aymara; y esto después de haber tra–
tado con indios por espacio de diez años ; observando siempre
con mucho cuidado lo qu e era a propósito para el arte y modo
de hablar: y puedo afirmar que no hay en estos preceptlJS
cosa
ninguna que no haya sido muy bien examinada con
los mis–
mos indios o aprobada por él!os. Bien sé que algunos dirán qu
este arte es largo; pero también sé decir que sin él. por mucho
que uno trate con los indios, alcanzará en mu chos años
lo que
aquí está observado; y estudiando con cuidado en muy brev
tiempo, con el favor divino, vendrá a saber mucho de esta
tan
copiosa lengua, especialmente si con
el
estudio del arte juntar
el
ejercicio del hablar. Porque así como uno que habla si n sa –
ber el arte, en los principios yerra a cada palabra, así uno que
sabe el arte y no tiene cuidado de hablar y saber más vocablos
cada día, no tendrá la expedición y prontitud qu,. e menester en
la lengua.
Reciba Ntro. Señor este pequeño servicio,
CU'I;
glo'ria et
imperium in saecula saeculorum. Amen.