Dll LAS SALINAS.
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sér de caballeros hijosdalgo no se sufria ménos;
y
mirando el
Adelantado
á
Gomez de Alvara<lo, le dijo que se acordase lo
mucho qu e siempre le había querido desde el tiempo que vino
<le Guatemala con el Ad elant ado D. Pedro de Alvarado,
y
que
para que enteramente lo conociese, le encomendaba el estan–
darte Real del Águila,
y
que le rogába que fuese en su lu–
gar junto
á
él. Gomez de Al varado, agradeciéndole aquell a
honra que le daba, dijo que él lo mira ria
é
guarda ria lo
á
él
posible.