CONDE DE LA MO CLOVA.
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dueño de minas. Fuera de la coca y otras valiosas
provisiones que se llevaban á los asientos, la
1nercancias ma;::; valiosas de las conducidas ente–
ramente por el interior, oran las mulas del Tuc.u–
man y la yerba del Paraguay.
La riqueza: producida por la agricultura, mi–
nería, industria fabril y comercio se distribuia
con notoria injusticia. Ni los esclavos, ni los
yanaconas, ni los mitayos podian salir de su mí–
sera .condicion, cualquiera que fuera la prospe–
ridad de los propietarios. Los operarios de las
minas tenian á veces buenas fortunas ; por que
la costum re a ia au 01i,zado, que rescataran
el e al a€aelo al alir, ciertos
o e
ta escrupulosos,
que no
~
ra líe aoi aun con per–
juicio el inal pa , or dueno. Mas la pulpería,
cuando ·no implacables acreedores, devoraban
pronto' es
r~ra
ganancia. Los mismos mineros
n su desigual comp ñía eón el ey al que debian
entregar el quinto libre, salian muy mal pa–
rád , ' no ser que le pag sen mucho ménos,
le quedaran debiendo los azogues,
ó
la riqueza
de la boya diera para t dos. Lo hacendados, que
en vano se li onjeaban de obtener pingües co-
echas con el imperfecto y no siempre barato
trabajo de los esclavo
á
poco que flaqueasen los