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ello se a.uia de hazer, hasta en tanto que el an;;o–
bispo de Seuilla Don fray Garcia de Loaysa vino,
el qua! le fue muy favorable, aunque otros de la
corte que eran grandes en ella y cabidos con el
rey, no le dieron credito, teniendo entendido que
era algun charlatan y burlador y qne no sabría
las nauega.ciones de Ja mar. Mas en fin y al cabo,
despue.s de conquistado el reyno de Granada, los
reye_s Catholicos le dieron audiencia, determinan–
do de le favorescer, fuesse verdad, o no, porque
en caso que tal podia ser auenturauan poco en
ello, y assi les parescio conuenible la demanda.
Esto se hizo mas por seruir en ello a Dios Nues–
tro Señor, que por
ot~o
respecto alguno, y con
·esto se tomo
assient~
con el dicho Colon, y se
hizieron las capitulaciones y recaudos que en tal
caso se requerian, y le asignaron la (
I)
dozaua
parte de los derechos reales y lierras que descu–
bdesse, con que el descubrimiento fuesse sin per–
juicio de los reyes de Portugal. Estos conciertos
se hizieron en la cibdad de Sancta Fee, y el pri–
uilegio se hizo en la cibdad de Granada, lunes
treynta del mes de Abril de
1492
años,
y
luego
Jo despacharon como el lo desseaua; el qua! era
hombre gran
traba~ador,
duro de condiscion
y
muy enojadizo; tenia buen& estatura
y
de grandes
miembtos; la color
b~rmeja
y
la cara llena de pe–
cas, y cariluengo. De manera que el primer capi-·
(1)
Tachado:
tercera.