/.
148
quando [delante) del se platicauan , y por esso de–
zia qu e se viesse el tes tamento de Adan para ver
s i manda ua la tierra del P eru a l e mperador Don
Carlos, o a los r eyes de Cas tilla ; y porque le tu–
uiessen po r gra n seruidor del tir a no quito del es–
ta nda rte las armas de Su fages tad , que es ta uan
pues tas en v na lanc;a alta. Y en s u luga r pusso las
a rmas de los Pic;arros, que el a uia manda do hazer
con v nas le tras zifradas, que e ra [n una] P. rebuel–
ta en vna G. y vn le trero a lá r edund a de l, que
assi dezi a, si la memoria no me engaña:
Por ar–
mas, a1
1
11ias g an e en
v1~rtud
de aquel qu e me las
pudo dar.
Y las armas R ea les hec hó en vn fu ego
que estau a en vn brassero en la cama r a, pa ra que
se quemassen , y saliosse luego fuera a la sala con
el otro estandarte, y Luys de Alma o camare ro de
Pic;arro , quito las a rmas R eales del fuego porque
no se quemassen y las h izo g ua rda r. Quando Fran–
cisco de Carauaj a l boluio a la camar a y no ha llan-
'
do las a rmas en el fu ego y viendo que a llí no auia
otr a per sona sino Luys de Almao, arrernetio a e l
con gran furia y le tomo de los cabec;ones y sacole
fuera arrastrando a la sala, ca tenia g r andes fuer–
c;as . Y ha zia grnn hincapie jurando por vida de su
Señor e l Gouernado r que lo auia de ahorcar por lo
que auia hecho , y sin duda lo hiziera si a la hora no
ali e ra Gonc;alo Pic;arro de u r ecamara, que le>
e toruo. Pu es ya en e te comedio e tauan todos
los capita nes y soldados fuera de la cibdad, que
no auia sino pocos para salir della, quando Fran–
ci co de Cara ua jal sali ó y fue tras ellos como el
irano se lo auia mandado , ) dende a ciertos clias