.¡
5
y se pussieron todos por memoria. Acaso [llegaron
1
do mancebo_s
rezi~n
venidos de España, que e1 vno
> .
. dezia Pedro de Prado
y
el otro Rodrigo Nuñez,
.
-~
que
(1 )
entrambos auian estado debaxo de la ban·
dera de Martin ·de Robles y despues de Matheo
Ramirez, el o·alan, qúe le
suc~dio
en la capitanía,
como ya queda dicho. Pues como vieron estos dos
mancebo$ que Goric;alo Pic;arro se auia apoderado ·
de la cibdad y que estaua ya yntronrc;ado en el
g·0uierno del Peru, y como_no tenían al presente a
quien eruir,
,Y
no auiendo
Oj
<;lo el pregon, y cre-
y ndo que no auia mas que
~azer
y que la guerr0-
raya acabada, se salieron de la cibdad
.,~se
fue–
ron camino del Cuico a buscar de comer, como po–
bres. No· falto .algun malsin, como
" ie~pre
lós ay
en donde quiera, que uissaron a Carauajal de la
) da destos hombre , que luego encontinente
~mbio
al furriel por ellos, con cie;;rto arcabuzeros, los'
quales traydos p su presencia los mando ahorcar
en el rollo que e. ta n medio de la plac;a, sin
conff ssion, · que no
1
admitio disculpa alo·una
por mu has que dieron, y les pu sieron sendos re–
tulos a los pie que dezian:
po1,, aniotinador s.
Por
to mucho cauallero que deuian al:::.·o se azora–
ron
j
e candalizaron mucho en ver e tas muerte
t an ) nocente , y dezian que pues aquellos om–
bre no aui n h ho por que sino salir e de
1 ,
cib–
d d , y que J?Qr ello mor· an, -que e.qué seria d llo ,
pu s auian enojado mucho a Gon ,alo fi<;arro? Y
por esta ausa y por otras muchas coment;aron
( 1)
T:ichado:
estauatt,
G.
D E "'ANTA C LARA.
- IT.- I
·º
:o