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en la cibdad no le dexarian entrar si traya ynten–
cion de hazer en la
cibd.adalguna nouedad. Los
que
escriuie~on
estas cosas
á
Vaca de Castro se
rezelaron del que les baria algun mal y qaño.por–
que no quissieron admitir los dias atrás
á
vn su
theniente que auia embiado en p.ombre de
SÚ
Ma–
gestad
des.deE;l Cuzco
á
la cibdad de Lima para
que assistie_sse alli -por el, y
á
es.tacausa y por
otros respectos
s~
temian del. Estos miSrJ10S laom–
bres escriuieron por otra parte al Virrey para
que se diesse priesa ·en llegar a la cibdad de Lima
antes que Vaca de Casfro entrasse en ella, para
que les quitasse de vn cu dado y rezelo que tenían
con su venida, el qual
veú.iaá _
ocupar la cibct·ad
con mano armada, trayendo consigo muchos hom–
bres armados, assi españoles como yndios. Y que
tenian entendido que si Vaca de Castro entraua .
primero en la cibdad, que no le rescibirian en el ,
gouierno como com c.'.nia; de todo lo qual le pesó
en gran manera, mas el lo disimuló por entonces
lo m ejor qu e pudo, y por tanto se dio priesa (1)
á
caminar, dexando los negocios que entre manos
tenia, para liazellos adelante. Los amigos de Vaca
de Castro le escriuieron por la posta diziendole
de cómo en cierta manera auian sabido que sus
emulos auian escripto al Virrey muchas cosas ·
contra el,
y
que en todo caso se diesse priesa
á
ca·
minar y entrasse primero en la cibdad antes que
el Virrey, porque con· su pJrescer y consejo se
determinasse lo que se auia de hazér acerca del
(1)
Ms.
p r üsn, priesn.