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111 T 1\1.\
pue1:lo y distritos marítimo recibiel'On órden de a¡ re lar buque arma–
dos y equipados, primor ensayo de conlribu ion mercante. e pidieron
veinte
á
la ciudad de Lóndres : esla manife ló qu para rechazar la ar-
. mada invencible de Felipe Il no habia exigido tanto la
1·
ina
1
abel ; ma
el gobierno conle lóque los pa ado ti mpos debian lomar e por modelo
de umisiony no de obje iones. Para justificar e te leng·uaje se hizo pre–
dicar por todas parles obedien ia pa iva. Jorge bbol, arzobi po de Can–
torbery, prelado popular que rehu óautorizar en su dióce i la venta de
tales ermones, fuedesterrado.
Se habian alucinádo en punto
á
los arranque del pueblo ; de niogun
modo pudieron persuadirle
á
que olvida
u libertad en ob cquio d u
creencias religio as. De confiaba por otra parle
1
pueblo de la inc ridad
de este nuevo celo ; olo
á
tllulo de que e le concedieran francfUicia , y
se convocara el parlamento , manire taba hallar e di pue lo
ú
dar u
apoyo
á
las reformas d
1
conlinenle.
~Jucho
iudadanos rehu aron con–
currir al empréstito ; lo mas ob curo ó ma d bile de lo fueron
alistado n la armada ó en el ej rcito ; otro fueron n ar eludo , y
á
alguno e les envió
á
omi ione
1
janas que no p dian r hu ar. i bien
el desconto no e talló en adicione , no por e lo e ali fizo on murmu–
llos. Cinco gentil-hombre , arre,lado de órden del on jo, r clamal'On
como derecho de todo ingles ulibertad bajo caucion. n rey imperioso y
una nacion irritada instaban por la sentencia. El re exigía do
1
ju es
que declara en como principio que ningun úbdilo arre lado por su ór–
den debia ser admitido
á
dar caucion ; el pueblo preguntaba i a no te–
nian garantlas los defen ore de u libertada . El tribunal de o
ó
su
demanda, mas no por e to autorizó el principio pedido por
1
re : t mi n–
do lo magistrados ambo estremo , no o aban a.humillar e ni r ju -
to , y para alir de apuro rehusaban al despoli mo su con entimiento
á
la libertad su apo o.
El pueblo en suardor; celo o ppr el so ten de todo sus der chos,
tomó bajo suproteccion
á
los mi mo oldado
1
inslrumento de la liré1-
nia. Do quier clamaban contra
u
escasos,
y
para reprimirlo e pu o
en igor la ley marcial. Tomó e
á
mal que un poder tan arbitrario fuese
jercido sin la adhesion del parlamento, y que lu ingle , oldado
ó pai ano , empleado en v jar ó en prot jer
á
u onoiudadano , se
ie en privados de la garantias legale .
En medio de e ta agresion, iempre impotente, p r cada día mas
agre
i
a, e supo que la pedi ion aviada al socorro de la Ro hola