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dt [4 Exhortacion á la Pirtuá. 19
poderte avisar: para que supieses un fuego de tanta lefia, ~ ::~~tas
que aquel divino poder usa de criaturas hay en él~ i Pue s quál
unos y otros medios para lo que e! el corazon , que andando en
quiere 1 Porque quando las cosas medio de un tan grande fu t>go, no
de que nos qu isar, son solamente no se quema, mac; aun
grandes, éstas él á decir no siente calor1 ¿Cómo recibien.
por mas alto~· y obleS' mensage. do á la C(ontinua tántos benefi–
ros. Y al cabo añade, diciendo:· cios, no alzarás alguna vez Jos
FinaLmente quaado acabares de. ojos al cielo á ver quién es ese
leer estos mis consejos,. di entre que te hace tanto bien~ Dime: si
ti mesmo:Estascosasnomelasha andando tú camino, asentándote
dicho Epicteto el Filósofo, sino al pie de una torre cansado y
Dios: iPorque de dónde tenia él muerto de h<1mbre, estuvi e e uno
facultad para decillas~ Pues no es dende lo alto prov-. yénd te be·
él, sino Uios, el que me las dix:o nigaament~ de todo lo necesario;
por él. Hasta aqui alabras iCÓmo te podrfas contener, que
de E.picteto. iPues Christia · no levantases aiguna vez los ojos
no no se afrentará de no Ilegal" á ''er quién es ese que asi t pro·
adonde un Filósofo Gentil llegM vee ~ i Pues qué otra cosa hace
Gran vergüenza es por cierto que Dios contigo dende lo alto,. sino
los ojos e ~clarecidós co lumbre estar lloviendo siempre beneficios
de fé , no vean lo que veiaa los sobre ti~ Oallh! una sola cosa de
que estaban asentados en las ti- quantas hay en el mundo que no
nieblas de la razc:m.. v~nga por especial providencia
1 del cielo. i Pues cómo no levan·
§ J. tarás alguna vez los ojos para
conocer y amar á tan liberal y
Colige de lo dlcbo, quán indigna tan continuo1 bienhechod i Qué
cosa sea nf> sérvir áN.S. es esto,. síno· haber perdido ya
los hombres. su mesma oaturale·
PUes siendo esto 3St, i qué Ji. za~ y héchose mf! Sinsensibles que
nage de desconocimiento es bestias~ Gran vergüenza es de·
andar nadando entre tantos be- cir, á quien somos en esto seme·
neficios de Dios, y no acordarse jantes; mas cambien es rdzon que
de quien los da1 DiceS.Pablo(a) oyga el hombr~ su merecido. S~·-· ~
que el que hace buenas obras á su mos semejantes e-n esto á lo/ilii–
enemigo, le echá carbones de males brutos que están. '.~axo la
fuego sobre Ja cabeza, para en- encina; los qua les qnando les estii
cenderlo. en su amor. Pues. sr to· su dueño dende lQ alto vareando
das qua otas criaturas hay en este la bellota, ocujiados dlos en co–
inundo, son beneficios de Dios;. mer y gruñir unos con oc ros so-
i qué se_rá todo este mundo,. sino . bre la comida, no miran á quien
c. ~ s,e
(a) Rom. 1Z.