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de la Doctrina de la Virtud. - 3r7
tos, ioclin,ndose ~ lo que pide dor para no desmandarse en co–
su amor; y las fuerzas. de todos sa con que ofendiese los ojos de
los miembros y sentidos, em • quien asi temia (b ). Por lo qual
pleándose ea executar todo lo con mucha razon se dice que el
que ordeflare este amor. Y por· temor del Señor echa fuera el
que de esta materia hay un tra- pecado: porque quando se teme
tado eotero en la se~unda parte mucho la persona , natural cosa
de nuestro Memorbl de la vida es temerse mucho la ofensa de
Ch-ri.sriana, ahí podrá ver lo que ella. .
quisitre de ella el estudioso lector. A este mesmo temor pertene-
La segunda cosa que des pues ce temer no solo las malas obras,
de este santo aroor se requiere sino tambien las buenas , si por
es temor: tl qual procede de es- ventura no van- tan puras y tan
te mesmo amor: porque quanto bien circunstancionadas como
' mas amais una p.ersona , tanto seria razon; por donde lo que de
mas temeis oo sQlo perderla, si- su naturaleza es bueno, por cui–
no tambien enojarla ·: como ve.- pa nuestra dexe de serlo. Por lo
mosque lo hace el buen hijo pa- qual dice S. Gre.gorio (e) que de
ra con su p.:dre, y la buena mu- buenas ánimas es temer cuipa
ger para con su madd~: que donde culpa no es: como mues–
quaato mas le qtiit: 1é, tao-to mas traque h tenia . el santo -Job,
trabaja porque no haya .en su qua.ndo decia (d): Temia y.o, Se·
casa cosa que le pueda dar pe- ñ'or , .todas las obras que hacia,
na. Este ttmor es gua-r. sabiendo que no disimulas el
inocencia : y por e11to castigo de lo mal •hecho. A es–
que esté ml!ly profu t:e mes mor pertenece. que
arra do en nuestra ánima, se- quando viéremos en los Ofi-,
gun lo pedia .el Profeta Da- dos Di s y en las Iglesias
vid ando decía (a): Traspa- (mayormente donde está el San–
sa, Señor , mis ca mes con. tt:¡ tísi mo Saoramen to }estemos am~
temor: po.rque de. tus juicios te- no parlando ni paseando, nic!~r­
mí. De .manera que no se con- ra.mando los ojos á diversas par–
tentaba esr:e sanco Rey con te- tts {como hacen muchos) sincr–
ner el temer de Dios arraygado con .grande temor y acatamien–
en su ánima, sino queria ·tam- to de aquella imperial Mages–
bien tener tr.a .;: pasadas con tad ame qu·ien es-tamos~ la {1ual
carne y sus entrañas.:. p~ra po.r .una .espedal manera éJSiste
este tan grande sent1m1eut en aquel lugar. Estas y otra·sco~
fuese como un clavo ado en sas tales perte~ecen á este sanl<>
el corazon , que le iese de temor• .t¡j' Y si me preguntar~s
perpetuo memorial sperta· como este sa~co afecto se cr-1a·
-ea.
(a) Pü. n .8~. (b). Eccl.1 .. (~). •9. Mor. c. 15, 1.6 .. 1:z. E1
habetur in c. Consulutt de obs.erv.JeJun.. (.d.) .Job 9•