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LA INQUISIOION DE LIMA
así fuimos a su cárcel, y estando en la cama muy agrava–
da de su enfermedad, que decía el médico que era una
postema en el hígado, dijo e confesó que aquellos demo–
nios que decían ser santos avían dado al dicho fray Fran–
cisco de la Cruz un anillo de oro, el cual traía el dicho
fray Francisco en el seno y que el dicho anillo se le avía
visto ella dar
visiblem~nte,
y cuando el dicho fray Fran–
cisco quería hablar con ellos los llamaba por aquel anillo
e que no abia oído ni sabia las palabras que decía, 1nas de
que mirando el dicho fray Francisco aquel anillo luego via
que venían aquellos ángeles o demonios, y declaró las señas
del dicho anillo y dijo que le avía dicho el dicho fray
Francisc'o que si le preguntáse1nos por aquel anillo, que no
lo dijese, que no tenia obligacion de decillo, y cuando el
dicho fray
Fra~1cisco
iva a su casa entrando donde ella
estava, preguntaba si estaba allí la buena compañia, y si
ella decía que estaba allí, hablava y platicava con ellos
lo que quería, y si decía que no estavan allí, sacaba el
dicho fray Francisco el anillo y luego venían, y algunas
veces los embiava a saber cosas de España
y
otras veces
les preguntaba cosas theolugía; y fecha esta declaracion,
se ratificó en ella ante personas honestas y en forma.
nE, despues, en once ele diciembre ,del dicho año, murió
y
falleció y pasó desta presente vida, la cual mandamos
enterrar en una caja clavada y secretamente en una capi–
lla del monesterio de la
Mer~ed,
el cual lugar está señala–
do y asentado por auto en su proceso.
nEl negocio de doña Maria: Pizarro se ha quedado en este
estado
y
no emos pasado adelante procediendo contra su
memoria y fa1na, porque, como no se le puso la acusacion,
no se proveyó de curador, ni con su·
autoridad~
ni ante él
se rratificó en sus confesiones, · y .como ella tan vá.ria e·n
ellas dejábamosla ir diciendo y animábamosla a que digese
la verdad y asentase en ella, haciendole sus moniciones,
y
atento a esto nos ha parecido que no deviamos proceder
a mas hasta dar cuenta a Vuestra S.eñoria, para que nos
ordene lo que sea servido, y sus bienes se estan en secresto.
"El proceso de :fray Francisco de la Cruz, decían en esta
ocasion los inquisidores, se a ido continuando y se le han
puesto otras dos acusaciones
y
él ba siempre declarando