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e
lllS~'ORIA
ECL'ESiÁ.STIO.A.
tuvo
que someterse
á
su :rival que
;poeo
tiempo después le hizo morir,
qaed~ndo
así Coastanti-no ún.Jco dueño del
Imperio,
y
triunfante sobre e¡ paganismo la religión
cdstiana.
·
Consecueu(d:ts
de
la páz de la
lglesta...._.
Gra.lildes
fueron
las
ventajas
de
la paz y de
la
protección
que C0nstantino dispensó
á
la Iglesia: . vióse
á
los Cristi5.nos abando–
nar los
desieTtos
y catacumbas,
d~md~
án–
tes
se ocuUabao,, ·para celebrar
~
la
faiz
él:el
mun.d<i>
los
rit0s
del
nuevo
cuitC'.>; constru.
yéronse
magnifiiet>s
templos
qué
se llama–
r~µ
iglesias
para
borrar
l@s
recuerdos
<d:el
:f>ªg.~nísmo;
el mismC\>
Oonsta,ntino hizo
e<li–
near
eu u
al
io
1.uaa suntmo-sa
capilla
y
mandó
cons
mr e-u Jerusalem
la
iglesí~
del
Sant6
lcro
y
otras muchas en Ni·
comedia, ntioquía, ®liópolis y en Oons–
t!}ntinopla.
La piadosa Samta
~1@na,
madre
del
EmpeFa<loT,
,deseu.'brió
lar
·verdadera.
crt1z en
que
murió el
Redent0r
y¡.~dificó
' iglesias en el monte Olivete
y .
en Bethlem.
El culto
Cristiano~
<
'J.Uehasta
entónces
ha–
bla s:ido
sencíilo,
..:fln~
a.mptiad'.o co1l!
Ql culto
de los santos y
mártiFes.
en cuy@
honor
se
instituye1·on
pompo:Sas Jie.stas,
pFeced-idas
muchas veces
de
ayunos
y
vigilias que se
suprimieron. más tarde por los desórdenes
•.lfl!te
0aasionaban.
Se
estab~cie:rrou
peregri·
nac1oaes
á
los
sautuari6A·,
ó
lugares
san
ti
fi..
e:ad<i>s
p<l>r
la prese1rnia
de
Jesucristo,
de los
.apóstoles
ó
de los
mártires,
y
procesi0nes