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H
~TORIA ~CLESIÁSTIOA
ct>nt0ner
su
marcha, era.,
pues,
indispensa–
ble volver al
clero
y
á
los monjes su anti–
guo prestigio por me(lio de la virtud, po–
nerlos en
estttdo
<l.e
refutar
el
error,
ins–
t1myénd(i)los,
é
ínfluir en
los
pueblos, ali–
v;iando sus
neee.~i<lades
por
nit~lliO
de Lais
viFtades evangélicas. Cou'
e~te
objeto se
ref0rmaron
muchas Órdenes religiosi:ts y
se fnn daron
1
nuevas
congregaciou~s.
Las
más
notables &on las siguientes: en el si'glo
XVI
los
Padres del
Oratorio, los
Hospita-
' lar
i.osde San
J·uan
de Dios,
los
CarmeJitas
Reformados
y
las
Ursulina~;
en
el XVII
las
Salesas,
los Benedictinos <le San Mau–
ro,
l@s Escolapios, los Lazaristas, Las Her-
manas
de
a
r"<la<l
'!f
1a
Tcra~ru;
en et si-
glo
XVII
-
entoristas
y
lljl!s Misioaes.
Padres
de
ato11io. - El
fundador
de es-
ta
congreg
~
16
S::in Felipe
Neri,
natu–
ral de Florencia, qne dedicado desde suju–
ventud
á
la instrucción -de
los
niños
y
al
servicio de los enfermos,
funrló
la
cofradía
de
la
Santísima 1-,rini<larl.
Est~
piadosa.
institución
fué tán
bieu
acogüla,
que con
se>lo el
producto
de las limosnas construyó
San Felipe
lUl
gran hospicio
ú
r0rat'Jori0- en
el que
se
lefa,
y
exp1ic~ba
la
' Sagr~.da
Es–
critura.
Tal fné
el
orígen
de
la
Órrlen
de
los Padres del
Oratorio
que autorizada por
Gregorio XIII,
~e
esparció
por IBalia
y
otros
,
paíse~
cat'ólieos
y <lió
varon
1
es
eminent1·.:,
ft
la
Iglesia.
ffospitalarios de San
Jnan
de Dios.-Es·
.
'