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148 1 IllS'roRlA :R0Lli1BI.ÍSTM'.:1A.
ro, hijo ~le l'adr~R p())bres, nacido en Ei~le­
hen; en Sajonia. Pasó Lutero sus primeros
afilos ~n la mis-eria, y se euc<?rntraba <le es–
tu<l1aute eu lá Uuivec~idad <le l:Drfnl't, cuau–
<lo vivamente iriopi·esioIJado por bti muerte -
repeutiQ.a de an a)migo, tomó el hát,,ito de
:fraile Agustino. Su vhla al en -el
conventC!> le atrajo el af>1•ecio de sns sn pe–
ri ores, y fnén0mli>radi<1> pro-f'esoi' ele la Uni–
versidad ~le \7\Tittemherg· eu la qt11e adqui–
rió celehrid.a.d t>or sn actividad y pre<l1ca–
cione5i.
~ Las lndu1gencias-J;>or ~ste tiempo {1517),
el PaJr>.a León X pnhho6 una bula <l~ in–
dt\l.lgen<'i , para e ntJ;ibi~ír Q,On limosna8 ái
los inge a ·tos que o a:~ la
cpL1sbrmcc n la cúf) 1la 'l San Pedro en
:Roma; y cm ~La, ¡predicación de la hu la en
..~Jema,yia á lo-s :h'~t~&s D-omq nicos Ql!le COfl–
virtieróu isu mis-Mu en un vergGnZORO trá–
fico y cometier(i)líl grandes abusos.- Sea por
esto, 0 po:r rivalidad cl~ corpo<raciióu, el
Agu.stilío Lutero atálcó á los Dominicos y
négó la eñemcia de las · indll.lgencias. –
qae el Papa, en tl'iíl pt'iti aipio, él i ó p6ca i m–
po:rta.ncja á l@s ata.qllles cle Lut~ro, 10 citó
para qt1e compa.r·eci~se ante su t1 íbnnal en
el tiéJ?WÜH) de 60 díais; 11>~r@ el Re:foFKnador
obtuvo que se le permitiera pres~nt&rse
soJaiment~ eu. Anslimrgo á Oayetanq Lega.
de.l qm~ mada pudo conseg-tilir de· é1
en la confereucia, y continuó esparciendo
aus doctridas, y sostuv~ ~.q la coufefencia
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