•
GENERAL•
I
4 3
, preJendidos
perfectos
entre "los
Chris-
·Siglo
nos,
y
que para
reducirlos .
á
l-as vias
co.. XVII.
1nes,
exhortaba
San
Pablo
á
los fieles
cde
á
.
1
y
)ffia ,
qu~
no
asptrasen
a las cosas ele-
das ,
á
no
seguir
la vana
fanta sma
de
una
sa
sabiduría ,
ántes bicen siguiesen
en
la
íctica
de
la·
virtud
las
reglas
de
la
pru..
ncia
y
moderaci..on.
He1nos
hablado
de los Hesicastas del si-
o
IV
y
del XI. H ereges de aquel
ti empo~
quienes
los Autores Griegos
nos pintan
có-
.o hombres encalabrinados de una
fal sa
es·
ritualidad ,
no
rnénos extra
vagan
res
en
sus
•
•
•
•
nnctptos
y
en sus
escntos, que
en
su con-
~cta,
y
muy
semejante 'i por estos _dos
pun–
:>s
á
los
Quietistas
modernos. H etnos
ciado
¡mbien
J
conocer
los
del
siglo XIV, que
to–
¡avía
lleváron
mas
adelante la locura
y
ca–
richo. La
mayor
part~
eran
rvionges
y
So-
1tarios que
habían
hecho
del entusiásmo una
:5pecie
de arte que enseñaban ,
y
en
que
el
:Úmero
prodigioso
de los
discípulos
que
se
1
~s
habi.1n
allegado ·hacia
progresos
m~s
6·
~énos
considerables ,
al
paso que tenian mas
:' ménos
calor
en la imaginacion
y
flexí~i-
~~~ad
en los
6rgarios.
Estos fanáticos adqui-
~Ieron
sequaces en todos los estados desde
los
~)ríneipes
,
los
Ministros.,
y
los Grandes
de
:~
Corte, hasta los Artesanos,
los
soldados,
{
el pueblo baxo. No h1:1bo
jan1as·
epidemia
de
/