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do trabaja, prestarle auxillo cuando peligra. Tan
•~ludablc providencia del divino Esposo, si so vé levon–
tada á complota evidencia por los innumerables benefi–
cios que constantemente le ha dispensado, brilla
ii
to–
da lnz al
refl~io
de los frutos copiosísimos, que por su
influjo han dado
al
orbe cristiano los Concilios ecumé–
nicos,
y
nominalmente el Tridentino, bien que cele–
brado en tiempos
calamito~os.
De aquí los santísimos
dogmas de la Religion <lcfinidos con mas preciston y
mas c1nrnmentc explirndoa; do aqui
lo5 errormt
conde–
.tlados
y
sus congecuencia.s
reprimiJss;
do
aqu{
la disci-
~~~~~~~~~~~~:!~~¡J:ª~~b!~~~~o~1
1
:s~~3[;
1
~~nl~n¿¡e~~fa
y
la pier!Rd, levantados los Colegios para formar
6.
hi
jnveutnd, destinada
á
la sacra rn.ilicia, las coatumbres
del pueblo ori:;tiano reformados va con la mas esmé–
rada instrncciou de los fieles, ya con el mas frecuento
uso de lo:; Sllcramentos. De aquí tambien mas cstr&–
cbuda la nñion de los miembros con la Cabezn visible,
y
la fuerza que de ella se a!lade á todo el cuerpo mls–
tico de Cristo; de aquí la multiplicaciou do las familia•
religiosas y de otros institutos de piedad cristiano; de
aqui en ün el a;iduo y ardoroao celo llC\'ado hasta la
efusion de la sangre, de propngar el reino de Oristo
por el ancho mundo.
Sin embargo, ruientrns recordamos con la grntitud
que es debida, estas y otras insignes Yentajaaqno In di–
vina. clemeucia principalmente por medio del ítltimo
Concilio ecuménico diHpensó
á
la Iglt:Bia; no podemos
lanzar
de nosotros el acerbo dolor, qtto nos
caos~n
ma–
les gravísimos, que tomaron mayormente origen
ó
del
desprecio con que entre
muchos
fué
mira-da
su
Rntoti–
dad, 6 de la indolencia con que se omitió la observan–
cia de sus sapientísimos decretos.
Nadie
i~nora,
que las heregías proscritas por los
re~?:cdi~~~
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¿as:~~~~~:nªejc~e~t:ªf\~
Religion
fueron
dejadas
licenciosamente
al
juicio
pri–
vado do
CHda U?J:O,
se
COtffirtierou
pá.ul;.ftí11am~nte
en
sectas muldplices, las cnalcs discor
dand(J
lttdtAndo
entre ef, vinieron
á
parar en la extinci
fé
en
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