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COl'(FESIO~ .
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mas grande,
y
luego otro mas grande,
y
ot~os
.ma.s,
y
mas es ten -
<lidos, así se multiplican los .escrúpulos en 'el alma , ·de quien
<1
uno
dá entrada,
y
multiplican pec·a·ios haciéndolos
Je
fo
que no
1.o
cs.
No se fi é' aunque sea mux docto' en
.Sii
pro-pio parecer ;
í]LIC
es causa propia,
y
será mwl
juerl,
ni estribe en su prudencia., ni
sea sabio en sus ojos; mire que no tiene juicio eu materia · d.e escni–
pulos; .Crea á su confesor corno á Dios, en cuyo lugar está ; fie de
él sn ahna., ..sujétcse á su parecer cautivando su ente11dirniento, qu e
de esta manera, aunque yerre su confesor, él acertará , y
mt~recerá en obedecerle por amor de Dios; y no consulte á otros, q1rn
le tornarán loco; obre contra el escrúpulo, escupiendo eu la Igle –
sia, comulgaIJdo sin reconciliarse, pisando el suelo donde le ·parece
que
hay
muchas cruces, y haciendo otras cosas, qne el confesor le
ha dicho que·no son pecado, aunque á él se le ·<rntoje que son mor•
tales; porque sus asombros se le lian de quitar, como se le quita
á
la hestia espantadiza su mal siniestro, hacié11dole pasar por la
sombra que teme, para que así pierda el temor. Y · si por hacer
esto, obligado de su confesor dejure rle confesar alguna cosa, él
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pecará ;
110
haga .caso de sus dudas, como no lo hace un generoso
lebrel <le los tímidos gozquillos qne le ladra11.
· Y si no pue<le jurar con verdad, y sin escrúpulo, que es pecado
mortal lo que se le ofrece, y que
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lo ha confesado, déjelo,
y
deponiendo el escrúpulo, comulgue, ó diga misa sin reconciliarse.
Si el escrúpulo es de no haber oido misa, ni rezado con
at.1~11-
ciou el Oficio Divino, 6 el Rosario que tiene prometido, etc., Jcs–
échelo luego, si no qui so voluntariamente dejar Je oir misa ,
ó
de
rezar; purqnc para cumplir con la atencion de este precept.o, basl.a
que éomience
á
oir la misa,
ó á
rezar con ánimo Je vacar
ü
Dios,
y
cumplir con la obligacion, y que mientras oyere misa,
ó
rez<írc,
no haga· acto en coutrario,
r¡uerie111lo no cumplir con la tal ohli–
gacion, el cual no se puede hacer por sola iuadv c! rtcucia, sino
con plena· deliberacion de
la volunla1l: luego no hay de que te–
ner escrúpulo. Allano mas
la .JificultaJ, au11q11 c advertidamente
esté _pensando en esto,
ó
en aquello hi c11 difcrc11Lc de lo que hace,
5Í 11 advertir, ui rnparar en que oye 111i sa,
ó
reza,
110
hace aclo eu