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2'2

LUNES SEGUNDO

libertinos estúpidos, de esos grandes del mundo tan po–

co cristianos, de esas

muger~s

sirl teUgi_on , de esos pe–

cadores que d}latan para la muerte su penitencia

y

su

conversion. Morir en desgrada' del rey;

'elil

el polvo, en

el abandono; morir en la tristeza, en la infamia, en los

dolores, mal grande es, no Jiene dM'da

i

pero no es sin

remedio, ni sin consuelo, si el pecado y la muerte

no

se ha1lan unidos juntamente; pero

la

muerte

en

pecado,

la ,muerte junta con el pecadG>

la, muerte por el pecado,

como sucede no pocas veces; imagináos·, buscad un des–

consuelo, una suerte, una infelicidad mas espantosa._

i

Y

se teme el día de hoy, dulce Jesus

mio;

y

se

t~me

mu–

cho esta

.e~pantosa infelicidad~

· ;

PUNTO SEGUNDO..

.

Considera como en el momento ·que se

mue~e

en peca–

d9, tod

o el mal que se hizo viene

á

ser eterho en su ·su–

plki.os

y en su malidai; y todó el @jen qué se 'babia · he–

cho~

q

uecJa perdido

y

olViidado para siem'pre. ·

~

,

Acciones

de

honradez, servicios hechos

·á

(>tros,

li–

beralidades der-ramadas, actos de religjon; porque en

fin,

no son los ateístas con quienes

habl~:

ayunos, oracio –

nes, buenas obras ,,

~10bleza,

f'é,I:rna, talent0s_, gloriar;, mé–

:r;ito, todo

mLl~ te,

todo se '

~-niquila

para el

~eca cil_

ot ql!le

mit:1ere.

i~penitente.

El tesoro de las misericurdias

qúed.ia.

cerrado para él, el rnananüal seco. Jesuc'risto se

olvida

1

por decirlo así, de la calidad, del nombre._>le padre, de

salvaqor, de rey, para r.evestir$e ·eternamente de la

eve:'.:.

ridad

cd.e

juez, <le

Dios

enojado, de Dios airado: ,

i

y

quiéh

puede

ha~er

frente ; Señdr·,

á

-vu~st:ra

indig1;1.a cion

irnita:r

da, á v.uest,ra

iV~nganza

infinita?

1i •quiéo,

p1~ede ~

C::Jn

tiú–

mero prodigjo

O ·

de pe-cadores, que viv:en en pecado, y

mueren impenitentes. Yo mismo, que hago ahora todas

estas terribles reflex;iones, si soy tan desventurado que

muero en peqdo

.

:·1

r

,

i

Y .como es posible no mo.fir- en pecado. _cuando se

dilata la penitencia hasta la

muerte~

Ctiando, se vi ve en

pecado, r aras veces dexa de ser la muerte semejamte

á

la vida. El pecador espira;,

pero

no

el pecado.

z

Cuán–

tas gentes, Dios mio, trabajan en su reprobadon

~

La

.

'