1000000976

613 / 628

DE VOTOS. 60 1
/
MEDITACION
DEL CONSUELO QUE SE TIEJ\TE AL FIN
del año de haber tmpleado bien el t iempo.
• 1
PU N T O PRIME RO.
C onsidera como no hay cosa mas dulce ni de
mayor consuelo, que el haber cumplido uno
con su obligacion, y haber hecho lo que debia; este
testimonio ·de la conciencia , com--nta y calma el
corazon , al mismo tiempo que derrama en el alma
una paz y una dulzura , que son sobre todos los sen–
tidos, y que el hombre carnal no es capáz de com-.
prehender. Pero entre todas las obligaciones del hom..
bre christiano, se puede decir que la mas interesan–
te y la mas sensible, por decirlo así, es el buen em–
pléo dd tiempo. Este pensamiento llena el corazon
y le sácia. Yo babia recibido del padre de familias
eHe talento par.a negociar con él ; le he'puesro á ga–
nancias; me he aprovechado de quantas ocasiones se
me han de hacer reditua talento,
y gracias Dios lo he conseguido; el Señor
quando quisiere , que yo estoy pronto á arle la cuen–
ta. He aqui lo que siente al fin del año una alma
fiel , que no ha dexado escapar ocasion alguna de
cumplir hasta con las mas pequeñas obligaciones de
su estado, y que mirando esta vi<la con ojos christia–
nos, ha comprehendido quan cadúca y miser· ble es,
y sobre todo, le impor tab4 usar bien de ella;
Ha consid~rado , que siendo como era extrangera
so-