48&
E X".E RCíf
Q
IO S
Díciembie,.
" cont inenciA
toda.sl}
.V·ida
,.y
n:iurió virgen.
El Após–
" tol le consagró bbispd·de 'Can'dia y le escribió esta
vcarta de Nic6p.olis áda
el
año
64 de
Jesu-Christo.
. : .. !}
E
f
_L
~
XI ON
~_S.
L
Á
gr.ai:.ia. dé-J;)i/Js
se
ha
manifestado;
~en
qué
y
cómo~
por el desprecio que se
hace
de la
Ma–
dre de
Dios
,
que no encuentra un rincon en una po–
sada
para:r.ecogerse; por la necesidad en que se ha–
lla el Señor del Universü"de nacer efl un establo; por
1a
extrema pobireza en que náce
un
Dios hecho Hom–
bre ~
La .gloria de ·los hombtes siempre tiene necesi-·
dad de resplandor, de brillo, de aplauso, de lustre,
~a:~
ser gloria;
p~r-o Djo~ ~o tie~~ ~ec~s~d~q
de e_s-_
tas ayudas exteriores;
el
mismo es
s~ · prop1a
gloria;
ésta es inseparable de sú sér,
es
independiente del jui-·
cio
y
de
la:
estin1acion de los ho1nbres;
y
Dios
tien~
tanta gloria entre los mas vi-les animales '
y
en
la
hu–
millacion de un pesebre,comb en la creacion del mun.;.
da,
·Ó
·elil
el famoso Tetnplo 'de ·Salomón. ·Todo
es
tnisterio., toao es prodigio en el Nacimiénto
del
Sal...
vador. No hay
cos~
que no sea un milagro; hasta la
extrema pobreza
á
que está reducido,
lo
es. El
Cielo
mani fiesta su gozo , lo•s Angeles
anuncian su
N
aci–
miento ,
una
nuevé\) estrella pubHca su Reyno. Perq
no
~on
estas las
señales ~
que
manifiestan
y
dan
á
cO-:..._
nocer
á
ese Dios Hombre. Las señales para conocer_;
le,
son los pobres pañales en que está envuelto,
~s
la
obscuridad del lugar, es el pesebre en que está recli- .
nado. Dios
no~ tlene
necesidad de una gloria extraña,
D ios encuentra su gloria ,-manifiesta su gracia,
y
há–
ee resplandecer su
~p,ipí;potencia
en lo mas vil
y
des.:-
.,
1 -
pre-