EXERCICIOS
Diciem.bre. su cuerpo aquellas inocentes crueldades, que hicieron
decir
á
los seculares, que el Padre Juan no podía vi–
vir sino por milagro. Luego que hubo llegado la re–
mesa de los primeros Padres Carmelítas, que se lla–
maron desde entonces los Carmelítas Descalzos, San
J uan que había sido puesto por Cabeza de ellos, pa–
só toda la noche siguiente en oracion con ellos ,
y
por la mañana del día siguiente, que era
á
28
de
Noviembre,
y
primer Domingo de Adviento del año
I
568,cel
bró solemnemente laMisa,hizo su profesion
pública,
y
recibió la de ellos, prometiendo todos
á
Dios,
á
la Santísima Virgen, su Madre
y
su protec–
tora pérpetua,
y
al General del Carmen su Superior
ordinario,
observ~r
literaJmente la antigua
y
esrre-
. cha Regla de la Orden.Entonce,s fue quando, dexan–
do el sobrenombre de San Marías, tomó el de Juan
de la Cruz, que , como se ha-dicho, hacía su verda–
dero caráEl:er. Este fu e el nacimiento de esta célebre
Congregacion Religio a, aprobada inmediatamente
por
el
Papa San
Pío
V.
y
confirmada el año
I
580
por Gregorio XIII.
á
la que se da el nombre de Car–
melíras D escalzos , porque llevan los pies descalzos;
los que despues de
2 00
años se conservan con aquel
mismo espíritu de oracion , de usteridad
y
de relÍ–
ro, que es. el distintivo de su lnsLÍtul
,
y
con aquel
-zelo ardiente que su Madre Santa Teresa les dexó
p r herencia, el qual los lleva no solo
á
ed fic ar
á
todos los fieles con su piedad exempla r
y
su exac–
ta r gularidad, sino tambien
á
pasa los ma res , para
ir por todo el Universo
á
tra bajar con el fr uto que
es notorio en la con ersion de los Infieles.
Viendose San Juan de la Cruz Superior inmedia–
to