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;rs,xERCIC!OS
Diciembre.
cibió
á
1a
vuelta, aumentaron el disgusto
con que ya
miraba antes todo lo que hay en el mundo de mas
lisongero. Aumentó sus exercicios de penitencia
y
de
piedad ; se vistió un áspero cilicio , del que jamás
se
despojó. La oracion , la leccion , y las buenas obras
ocupaban todo el tiempo que le dexaba libre la pre...
cisa asi stencia al
So,ber-ano.
Le llamaban el Reli–
gioso de
la
Corté'; porque en -medio de la Cort.e
vivia tan retirado y tan abstrahido, como pudiera
~n
el mas espantoso desierto. Pero Dios habia des..
· ºtinado á nuestro Santo para que fuese tmo de los
mas bellos ornamentos de la Dignidad Episcopal,
,des pues de haber sido la admiracion de toda
la
Corte.
Habiendo muerto
San
Acario, Obispo de
No–
yon y de Tornay, el Clero
y
el pueblo se convi–
nieron en ped ir
á
San Eloy por
!.U
Obispo.
Daga~
berta babia mwerto
á
la sazon,
y
su hijo Clovis
11
no
podía
resolverse
á
privarse de }a presencia de
· un
súbdito , cuyo'S
sabios consej o·s
le eran tan ne–
cesarios. Sin embargo , la necesidad de la Igles ia
pudo mas para con
el
Rey que la del Estado ; pero
había otro obstáculo mucho mayor que vencer; este
era la humildad de nuestro Santo; se· superó no
obstante ,
y
á pesar- de sus ruegos,
de
sus hígrimas
·y
de stls razones,
fue
preciso
que
se resolviera
á
· recibir
los sagrados Ordenes ; despues
de
l{)
ql'lal
se
fue
á
Roan ,
en donde fue consagrado Obispo·
el
· año
640 ,
con
su
íntimo
amig{)
San Obén ,
que
se
t:onsagró al mismo tiempo-.
~
San
Eloy
no
volvió á
fa
Corre sino para despe–
.. dirse
de
ella
pa-ra
siempre;
se
fue-
á
N
oyon· ,
en.
don-