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VIDA DE CHRISTO
Dios? ¿El tallér de un artesano era una habitacion
digna del Salvador de los hombres? ¿Una vida escon–
dida
y
desc;onocida debía ser la vida del Mesías?
¿,Un
retíro tan. largo era conveniente
a
un Hombre-Dios?
Es menester que asi fuese; pues el que era la sabiduría
por esencia·,
el
que no hace nada que no sea con una
prudencia consumada, lo juzgó así.
¿Quien tenía mas en
el
corazon , quién deseaba
-promover mas
la
gloria de su Padre , que el Hijo de
Dios? ¿Quién conocía mejor que él los medios que
eran mas
a
proposito para procurarla? ¿,Por ventura
la
salvacion de los hombres no era el fin de su Encar–
nacion? ¿Ignoraba acaso que la conversion del Uni–
verso debía ser su obra? Luego era precíso que una
vida pobre, humilde
y
obscura hasta la edad de treinta
años, glorificase mas,
y
fuese mas grata
a
Dios, que
las mas estupendas
m~ravillas
: luego
la
obra de
n~es
tra salvacion pedía este silencio, este retiro, esta obs–
curidad de-vida por todo aquel tiempo. ¡Oh,
y
cómo
esta verdad confunde visiblemente nuestra falsa pru–
dencia!
t.,
Quién de nosotros no hubiera pensado l&
contrario~
Sin
embargo, Dios piensa
y
obra de dis–
tinto modo : ¡pero qué de misterios
y
que de leccio–
nes en esta vida escondida de Jesus! El Padre Eterno
quiere ser glorificado con la vid,a obscura de su Hijo;
y
el Hijo de Dios prefiere esta oscuridad de vida
a
todas
las maravillas de una vida brillante
a
los ojos del
Mun~
do. ¡Oh,
y
cómo esto nos enseña claramente, que la
perfecciqn
y
el mérito no consisten en hacer, ni en
padecer grandes cosas por Dios, sino en no querer,
ni hacer sino lo que le place
a
Dios!
A la verdad, Jesu-Christo en
el
tallér de Nazaret
'
glo~