S
NTISIMA VIRGEN.
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advirtiendo la Santi ima Virgen que estaba
a
la mesa
junto
a
su Hijo , el embarazo en que se
h
liaban los
que los habian convidado ,
y
que riendo ahorrarles
la
confu ion que
les
iba
a
causar
e
ta falta de pr vencion,
mo tró al Salvador el deseo qut:! tenia de que los
aca–
se de aquella pena con algun milagro. Esta Madre de
·misericordia , que previene
iempre nue tras nece ida–
des , se contentó con decirle en voz baxa que no tenian
mas vino :
Vinum non habent.
El Hijo de Dios , que-
1·iendo hacer ver el poder que tenían sobre él hasta las
insinuaciones de su querida Madre , anticipó en aten–
cion
a
ella el
tiempo de manifestar
su
omnipotencia,
convirtiendo inmediatamente el agua que habia en seis
tinajas , en un vino excelente : e te fue el primero de
los milagros
públicos que hizo el Salvador , el qual
quiso que se debiera
a
los ruegos de su querida Madre.
Habiendo tenido por conveniente el Salvador es–
tablecer su principal residencia en Cafarnaún , la San–
tisimá Virgen que no lo dexaba un punto , vino
a
es–
tablecerse igualmente allí.
.San Epifanio
y
San Be rnar–
do dicen, que lo acompañaba las mas ve'"'e en
u
co r re–
rías Evangelicas, no solo por tener el c n uelo d
oirle
mas amenudo , sino tambien para cuid r de él en sus
viages. Encontr6se con él en J erusalén en
la
fi
ta de
Pasqua ; despues de la qual le sigu ió
a
la
riberas del
Jordán' donde el Salvador com
z
I
a
confe ir
Sll
Rm–
tismo. Los Santos Padres no dudan qu
la Virgen
lo
recibió
de
mano de su Hijo ,
y
aunque como esenta
de
toda culpa, aun venial ,
y
pre
erva
a ,
_c
m
s
ha
d i–
cho de pecado original, parece no tenia n ecesidad
del
bautismo; sin .embargo , no qui o dexarlo de recibir,
despues que el mismo Salvador
se
había
s
j
tad
a
Ja
Ddd
ley