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DIA XXIV.
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un prrnto sobre la ·necesidad de venceriJs
~
Pero no es cier–
to , que estas dificultades sean tan gr:mdes· como se abul–
tan.
A
un enfermo , y
á
lln
niño qualq11ie'ra carga se le–
hace muy pesada ; pero en
cr~ciendo
éste , y en sanan–
do aquel llevan la
m~;nu
carga sin difi.cnltad. La mala dis–
posidon de nuestro corazon hace qne nos parezca tan pe–
noso el camino del Cielo. Digan los mundanos lo que qui..
sieren , el yugo del Señor es suave,
y
su carga ligera: <qué
dificultad , qué estorbo , qué aspereza h1y , que su
gra~
cia no la facilite , no la ·endulce , no la allane?
Pero concedamos
á
los Christianos tibios , y cobardes, ·
qne el negocio de la salvacion tiene sus dificultades , que
es penoso.
¡Y
por eso le hemos de mirar con indiferencia,
nos hemos de acobardar, hemos de emperezar en trabajar
en él! Sin embargo, esto es lo que se hace
el
dia de hoy
en
el
mundo :
y
quiera Dios , quiera Dios , que no haya
tambien algo de esto aun en la mis·ma vida religiosa. Lue–
go se distinguen los· fervorosos de los tibios. Sie1npre se–
rá verdad, q•Je las
ersonas verdaderamente piadosas , las
que se ocupan únkamente en el negocio de la salvacion
componen
n ·ebañcr pequeño :
Pusillus grcx.
Parece que
ya ha pasado
á
er prescripcion la costumbre de mirar la
salvacion con ojos indiferentes ; apénas se piensa en ella,
y
falta poco para que se tenga lástima dé los que ocu–
pan en esto su pensamiento. Aqu·ellas personas n1undanas
tan
divertidas ,
y
tan alegres; aquellos hombres de nego–
cios , y de pasatiempos ; aqnellos libertinos ; aquellos in–
devotos ; aquellas gentes tan poco christianas , que jamas
piensan en el infierno, en la
erernid.ad, en la salvacion, sino
_ quando la muerte los amen
ata, y los asusta; que solo se lle–
gan á
los
Sacramento.s, quando la muerte se va lfegando
á
ellos;
todos estos Chrístianos , fantasmones de la Religion
1
~mi
un
la salvacion como su único ,
y
mayor negocio? Aun
aquellas personas consagradas
á
Dios por voto , y obliga–
dls por estado ,
y
por profesion
á
caminar incesantemen–
te
á
la perfeccion cluisdana,.
~viven
siempre ·ocupadas en
el cumplimiento de sus obligaciones? ¿Se afanan mucho
por aspirar
á
lo
que
deben?
~No
tendrán cosa
de
que acu-
Ggg
2
sar-