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602

L A PROPHECIA DE ISAIAS.

rem ves t rum non in saturi tate?

Audite audien tes me, et come–

dite bonum , et dele<Jtabitur in

crassitudi ne anima vestra.

3

l nclinate aurem ves ram,

et veni te ad me : audite , et

vivet

anima

vestra ,

et

fe–

riam vobiscum ·pactu • sernpi–

t ernum , misericordias " David

iideles.

4

Ecce testem Populis dedi

eum , ducem ac praeceptorem

gen tibus.

5

Ec~e

gentem quam nes–

ciebas , vocabis , et gentes quae

~

non cognoverunt , ad te cur–

rent , propter Dominum Deum

tuum , et Sanctum Israel ,

q

·a

glorificavit te.

6

Qu

erit Dominum , dum

i nveniri potest : invocate eum,

dum

prope est.

7

Derelinquat impius viam

suarn , et vir iniquus cogitatio–

nes suas , et revertatur ad Do–

minum , et miserebitu

eius ,

et

1

Las misericardias que prometi a

David ,

y

que cump lire fi elmente. V ease

el

Psalm . Lxxxv111.

E ste concierto

y

estas misericordias. prometidas a David

comprehendian el nacimiento del Me·s–

sias ,

m

Imperio

y

thr~o

eterno ,

y

la

libertad

y

res~ate

del geoert" humaoo ..•

V ease dicho P salmo,

y

A llor.

x111.

34.

en d onde

se

anuoc ia que tuviero

su

cumplimiento en Jeso Christo estas

~ro­

phecfas de t,:i.nto consuelo para el muodo.

s

D are al Messlas

par

testigo

de la

verdad

y

d el cump li(lliento fiel de estas

prom

~s .

'As! el prooombre

eum

se re–

fier e inmediat amente a Jesu Christo, que

es el tes tigo

fiel

de los Pueblos ,

y

el

M aestro universa l de las genres.

'

Llamari ~

, o Christo ·, a militar ba–

;o del estandarce de tu Cruz

al PueblrJ

"

A Etor.

XI I I.

34·

trabajo no en hartura

'?

Oidmecon

atencion,

y

corned lo bueno,

y

gozarseha vuestra anima en la

grosura.

3

Inclinad vuestra oreja ,

y

venid a

m!:

oid,

y

vivid. vuestra

anima,

y

hare con vosotros una

alianza eterna , para que sean es–

tables las misericordias prometi–

das a David

1 •

4

Ved que le d.l a los Pueblos

por testigo , por Caudillo

y

por

Maestro a las gentes

2

5

He aqui llarnaras al Pueblo

que no conocias

3 ,

y

las gentes

que no te conocieron, correran

a

t1,

por ampr del Senor tu Dios

4,

y

del Santo de Israel, que te, glo–

rific6.

6

Buscad al Senor, mientras.

puede ser hallado: llamadle, mien–

tras

es

ta cerca

s.

7

Dexe el impio su

camino~

y

el varon iniquo sus pensamien–

tos ,

y

vuelvase al Senor,

y

ten–

dra misericordia de

el' y

a nues-

que no conocias,

Q

Ios Gentiles ,

:.t

quienes

no conocias ni cootabas como Pueblo tu–

yo. Tal es la vocacion de las gentes;

y

tan claras las prophecias de esre suceso.

4

De

la

gracia , santidad , sabidurfa,

milagros con que

te

lorificara

y

ensaJza–

ri

tu

Padre.

5

Mieotras viv!s en esta vid a mortal:

mieotras se os concede ti empo para que

OS

arrepintais

y

volv ais a el. 0

tambien :

M ientras que vive ·y conversa con voso–

tros

:estido de la misma came. P orque

en el ti empo de le. Ley nueva es ta D ias

mas cerca d e oosotros, queen el d e

Vi

an–

tigua, por causa de la natoral eza hJ.?nana

que

tom6 hac iendose hermano nuestro.

Loque se ap lica en p art icul ar a los

J

udfos,

como lo expuso S.

P A BLO

II .

Corinth.

v 1.

y

el mismo Jesu Christo. Luc.

xn. xix.