CAPITULO
XXV I II.
2(I
_ I3
Certamen festinatum in–
cendit ignem : et lis fostinans
effundit sanguinem : et lingua
testificans adducit ·mortem.
14
Si suffiaveris in scintil–
lam , quasi ignis exardebit: et
si expueris super illam , extin–
guetur: utraque ex ore profici–
scuntur.
l
5
Susurro et bilinguis rna–
ledictus : multos enim turbabit
pacem haben tes.
16
Lingua tertia multos com–
movit , et dispersit illos de gen–
te in ·gentem:
17
Civi~ates
muratas divi–
tum destruxit , et domos magna–
torum effodit.
18
Virtutes Populorum con–
cidit , et gentes fortes dissolvit.
19
Lingua
tertia mulieres
viratas eiecit , et privavit illas
laboribus suis:
20
Qui respicit illam , non
habebit
requiem , nee habebit
amicum in quo requiescat.
2
r
Flagelli plaga
li
vorem
facit : plaga autem linguae com–
minuet ossa.
22
Multi ceciderunt
in ore
gladii , sed non sic quasi qui
i.nterierunt per linguam suam.
23 Beatus qu·
tectus est a
-lingua nequam , qui in iracun-
• De enemista.d ·, de irn
y
de colera...
!l
Muchas veces acaece , que los que
·dan testimonio contra otro,
y
por con–
•siguientP-
fo
ponen en grande p:ligro , se
·atraen a si mismos un grave dano.
3
El Griego
7roAAOV5
o/tXP
elp11vEvov–
-ras
a?rw)..wav
,
perdieron a muchos que
tenian paz.
4
Un tercero que con su mala len–
gua procura sembrar discordia entre dos.
.
s
Obligandolos a abandonar su casa,
1.3
La contienda precir).itada
enc1endeel fuego
1
:
y la lid apresu–
rada vierte la sangre: y Ja lengua
que atest'gua trae la muerte
2 •
l
4
Si soplares en una chis- ··
pa
~
enc\ .derseha como fuego:
y s1 escu· eres sobre ella apa.-
,
'
garseha :
I
.uno
y
lo otro sale
de la boca.
· •
l
5 El chismoso
y
el de dos
lenguas maldito es: porque pertur–
bara
3
a muchos que tienen paz.
16 .
La lengua de un tercero
4
desasoseg6 a muchos ,
y
los· der–
ram6 de gente en gente
s:
17 Ciudades muradas de ri–
cos destru
y6
,
y casas de Grandes
rnioo por los cimientos.
18
Fuerzas de Pueblos
6
des–
barat6,
y
genres fuertes .deshizo.
19
.La leo gua de un tercero a
mugeres varoniles ech6fuera,y pri–
v6las de lo que habian trabajado
7:
20
El q ue atiende . a
ella,
no tend
ra
descanso
8
;
ni ten–
dra a,mig
en quien repose.
21
El golpe del azote hace
Cardenal : mas el golpe de la len–
gua desmenuzara los huesos.
22
Muchos cayeron al filo de
la espada ,
p€fO
no tantos como
9
los que murieron por su lengtrn.
23
Bienaventurado el que es–
ta
a cubierto de la mala lengua,
y
a buscar su sosiego en tierras extrafi.as.
6
y
exercitos de N aciooes enteras,
yde los Pueblos mas valientes .
7
De su casa, haciendolas perder
to-–
do el fruto de sus tareas
y
desvelos.
s
El Griego
oM£ 'lta-rault11vw<Tei
µe9 '
~O"vx.Jas
,
ni !udlara sombra
en
dond~
viva con reposo;
.
9
Porque machos mas son los que pe..
recieron por su lengua. Tal es el estrago
que causa el desenfreno da la lengu_a.